Los líderes de la Unión Europea se reunirán en un debate que promete ser tensa y estratégico sobre la política de migración, con un claro llamado de varios estados miembros hacia un endurecimiento de las políticas de asilo y deportación. La reunión, que contará con la presencia de la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, fue inicialmente convocada por la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, junto con los mandatarios de Países Bajos y Dinamarca, en un formato reducido previo al Consejo Europeo formal.

A pesar de la resistencia de los organizadores a confirmar una lista cerrada de asistentes, fuentes diplomáticas indican que participarán cerca de una docena de países, entre ellos Polonia, Hungría, Malta y Grecia. Sin embargo, es notable la ausencia de los países bálticos y del presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, quien ha rechazado la idea de crear centros de deportación fuera de la Unión Europea.

Debate sobre migración en la Unión Europea: líderes enfrentan posturas divergentes

Desde la capital europea, el primer ministro de Eslovenia, Robert Golob, ha expresado sus reservas sobre la viabilidad de los centros de detención en países terceros, una propuesta que ha sido mencionada por Von der Leyen en su invitación a los líderes para explorar soluciones innovadoras. Este enfoque ha sido impulsado por un documento conjunto de 14 países del bloque, que sugiere la necesidad de acciones decididas para facilitar, aumentar y acelerar los retornos de migrantes.

La jefa del Ejecutivo comunitario ha destacado la experiencia de Italia con Albania, donde se ha acordado trasladar a migrantes mientras se resuelven sus expedientes de expulsión. Golob, por su parte, ha advertido que "Albania no es una isla donde puedas encerrar a migrantes", calificando la medida de "solución transitoria".

Meloni defenderá su política de deportaciones a Albania

Durante la reunión plenaria a 27, los líderes tendrán sobre la mesa un texto de conclusiones que, en sus primeros borradores, incluye varias referencias a la política migratoria. Sin embargo, podrían ser eliminadas de la redacción final debido a las reservas de delegaciones como la de Polonia, que aboga por un debate abierto y posponer las declaraciones hasta que las discusiones lleven a propuestas concretas.

El borrador también contempla la necesidad de considerar "nuevas formas de evitar y contener la migración irregular", siempre respetando el Derecho de la UE e Internacional. Aunque no se mencionan explícitamente los centros de deportación sugeridos por Von der Leyen, se subraya la importancia de implementar la legislación adoptada en la UE y aplicar la legislación existente.

Este encuentro llega en un momento en que varios gobiernos se han distanciado de las reglas comunes en materia de migración y asilo, con Países Bajos y Hungría solicitando excepciones para no aplicar el Pacto de Migración y Asilo recién negociado. Además, Polonia ha anunciado su intención de suspender las reglas de asilo en su frontera con Bielorrusia, citando la presión migratoria como resultado de "ataques híbridos" atribuidos a Rusia y Bielorrusia.