Vitali Kitschko es el alcalde de Kiev y ha tomado la determinación de decretar un toque de queda que entra en vigor este mismo martes, hasta el jueves, hasta las 07:00 horas del jueves. La decisión se enmarca en un escenario "difícil" y "peligroso" debido al avance de las tropas rusas en las inmediaciones de la ciudad. 

El regidor ucraniano ha especificado que los ciudadanos deberán restringir sus movimientos -a excepción de los que estén en posesión de pases especiales- desde las 20:00 horas de este mismo martes hasta las 07:00 del jueves. "La ciudad atraviesa un día difícil y peligroso", ha mantenido Kitschko. 

"Por decisión del mando militar, desde hoy a las 20.00 se establece un toque de queda. El movimiento en la ciudad queda restringido a menos que se tengan pases especiales. Únicamente se puede salir a la calle para desplazarse hasta los refugios", ha explicado el alcalde capitalino. 

De esta manera, el primer edil de Kiev ha instado a la población a permanecer en casa duirante los dos próximos días y que pongan especial atención en las arlamas. En la mañana de este martes, se han contabilizado innumerables daños en diversos edificios a lo largo de la ciudad fruto de las bombas lanzadas por las tropas invasoras. Además, se ha registrado una fuerte explosión en la estación de metro de Lukianovskaya. 

Por el momento, las autoridades ucranianas han hecho el balance habitual de bajas y han incluido a dos civiles muertos por el impacto de un proyectil contra un edificio residencial. El Servicio Estatal de Emergencias ha informado sobre ello, añadiendo que otras 35 personas han tenido que ser rescatadas del mismo inmueble. 

Asimismo, otro ataque ruso se ha saldado con el impacto de otro proyectil a un edificio de índole residencial de nueve plantas, en el mismo distrito de Sviatoshinski. Por el momento no existen informaciones que incluyan víctimas mortales, pero los ataques rusos sí han derivado en un pertinaz incendio.