Este martes, el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) ha emitido una alerta sobre el dramático incremento en el número de desplazados y víctimas civiles en Líbano, a raíz de los recientes bombardeos por parte del Ejército de Israel. Según los datos proporcionados, más de 550 personas han perdido la vida y más de 1.800 han resultado heridas desde este lunes. Matthew Saltmarsh, portavoz de ACNUR, ha subrayado que "decenas de miles de personas se han visto forzadas a huir" y ha reiterado que "el balance de víctimas civiles es inaceptable".
Saltmarsh ha hecho hincapié en la necesidad de proteger a los civiles y la infraestructura civil, calificando la situación de "grave preocupación" por el recrudecimiento de los ataques. Además, ha destacado la urgencia de poner fin a las hostilidades y ha llamado a la comunidad internacional a incrementar su apoyo a Líbano y su pueblo. En este contexto, ha recordado que "debe respetarse el Derecho Internacional Humanitario".
Los devastadores bombardeos en Líbano están costando vidas inocentes y obligando a miles de personas a huir. Esto tiene que acabar. Estamos en Líbano desde hace tiempo, apoyando a refugiados y comunidades de acogida. Ampliaremos la ayuda, asistencia en efectivo y atención médica.
— ACNUR España (@ACNURspain) September 24, 2024
ACNUR ha estado trabajando intensamente para proporcionar ayuda urgente y protección a los afectados, tanto libaneses como refugiados. El organismo ha sido activo en el establecimiento de "refugios colectivos" y en garantizar acceso a servicios de sanidad y apoyo psicosocial. Saltmarsh ha indicado que actualmente están evaluando posibles sitios de refugio en el Monte Líbano y Beirut, y considerando la apertura de centros en Sidón y el valle de la Becá.
ACNUR denuncia el aumento de víctimas civiles en Oriente Próximo
Asimismo, el portavoz ha mencionado que, en colaboración con el Ministerio de Sanidad libanés, están preparados para trasladar bienes esenciales de ayuda y entregar ayuda en efectivo una vez que reciban la aprobación necesaria. Este esfuerzo se suma al apoyo continuo a más de 100.000 personas que ya habían sido desplazadas de las regiones en el sur de Líbano antes del último repunte del conflicto.
En cuanto a los refugiados palestinos y sirios en Líbano, que actualmente suman alrededor de 1,5 millones, Saltmarsh ha explicado que estos enfrentan un nuevo desplazamiento que "exacerba sus vulnerabilidades", ya agravadas por la pandemia del coronavirus, la crisis económica y las explosiones en Beirut en agosto de 2020. Finalmente, el portavoz ha mencionado que se ha registrado movimiento de refugiados hacia la zona norte de Líbano y que, aunque aún no tienen cifras exactas sobre el movimiento de libaneses desde este lunes, esperan poder actualizarlas pronto.