La extrema derecha en España está llevando a cabo una "caza de brujas" digna del Macartismo, una persecución que se llevó a cabo contra aquellos estadounidenses con ideología comunista durante los años 50. Aunque lo de 'cazar brujas' viene de mucho más atrás, cuando en la época medieval se asesinaba brutalmente a las mujeres que demostraban ciertas "habilidades especiales" lo que ahora podría ser, tan siquiera, tener opinión propia o conocimientos médicos.

Hoy en día interviene un factor que está cambiando la 'cacería': las redes sociales. La forma más fácil de hostigar y perseguir a alguien para destrozar su imagen y crear bulos alrededor de su trabajo es... Twitter. Un arma de doble filo: informa al instante de cualquier noticia aunque ocurra en la otra punta del mundo, pero es una herramienta perfecta para generar el odio y la difamación.

Crear una imagen falsa en torno a una persona o las actividades que realiza es extremadamente sencillo con la publicación de un mísero tuit.

Desde Vox, el partido ultra liderado por Santiago Abascal, llevan prácticamente desde su comienzo utilizando su relevancia en las redes para perseguir a aquellas personas u organizaciones que van en contra de su ideología. Ya sean las charlas de COGAM para visibilizar y sensibilizar sobre el Colectivo LGTBIQ+ en los colegios de Madrid, o las asociaciones feministas que ayudan a víctimas de violencia machista en Andalucía.

FACUA es el último objetivo de la formación de extrema derecha, más concretamente su portavoz, Rubén Sánchez, quien está sufriendo un "acoso y derribo" por parte de concejales, diputados, responsables y afines de Vox a través de Twitter. ElPlural.com se ha puesto en contacto con él para comprender mejor la presión a la que está sometido.

Desde los inicios de Vox

Rubén Sánchez confiesa que la persecución a su persona por parte del partido ultra "comienza cuando comienza Vox prácticamente" y añade que José Luis Sánchez-Saliquet, actual líder de Vox en Ibiza, "antes de que estuviera en el partido y fuera más conocido, ya lanzaba todo tipo de insultos contra mí". Saliquet es nieto del General Golpista Andrés Saliquet, reconocido como uno de los mayores genocidas del franquismo, atribuyéndosele 137 muertes. 

El portavoz de FACUA explica que las ofensas no son solo contra él, sino también contra su mujer "ha llegado a plantear que mi mujer era prostituta, preguntándome si yo soy su chulo" y se lamenta "esto lo publicó esa persona que ahora mismo es un cargo de Vox en las Islas Baleares y ha sido candidato".

"Entonces, hay gente de la ultraderecha que antes de estar en Vox siquiera, pues evidentemente ya me tenían su punto de mira" señala Sánchez, y enumera "Luis Pineda o Miguel Bernard, de Manos Limpias son un ejemplo".

También ha recibido ataques desde Vox oficialmente, "Vox Sevilla me ha llamado en su cuenta oficial de Twitter 'sinvergüenza', en el año 2015, diciendo que yo conformo Podemos". No obstante, el portavoz aclara que él no forma parte de ningún partido político aunque sí "es público y notorio que voto a Podemos"

Otros responsables de Vox en Sevilla, ciudad en la vive actualmente, le han insultado también refiriéndose a él como "mal bicho", así lo publicó María José Piñero, número dos de Vox en la capital andaluza.

Y siguiendo en la misma línea, el coordinador del partido ultra en Sevilla, Ángel Bordas, decidió lanzar insultos o insinuaciones hacia Rubén Sánchez de carácter homófobo "intentando trasladar la idea de que soy gay" comenta el portavoz de FACUA, y explica "no lo soy pero aunque lo fuera, da lo mismo, no voy a sentirme mal o insultado por eso". 

"Este tipo de gente te lanza insultos como si fueran niños, creen que por sugerir con determinados mensajes que tú en realidad eres homosexual te va a ofender o va a dañar tu imagen" manifiesta Sánchez y pone de ejemplo al abogado Luis Pineda, que difundió el mensaje "de que yo en realidad era homosexual y que me había casado con mi mujer para que ocultara mi homosexualidad", algo que resulta incoherente, pero el portavoz lo aclara "este tipo de invenciones homófobas son muy propias de la gente de la extrema derecha"

Ahora cuestionan las subvenciones de FACUA

La última de las batallas que desde la organización de Consumidores en Acción-FACUA están librando contra Vox es la petición de estos últimos de que hagan públicas sus cuentas y las subvenciones que reciben del Estado. Unas cifras que se pueden encontrar en la página web de FACUA y de el resto de asociaciones del consumidor en el ámbito nacional.

"Todo ha ido in crescendo, a la par que Vox, también han crecido los ataques contra mí y contra FACUA a nivel institucional" comenta Sánchez, que entiende que ahora mismo el partido de Santiago Abascal "tiene en marcha una cacería contra FACUA". Y lo justifica con, por ejemplo, el tuit de una concejala del partido en Sevilla, Cristina Peláez, que ha dicho literalmente "querer desmantelar el 'chiringuito' que es FACUA".

Para llevar a cabo su objetivo, y de forma oficial de cara a la Junta de Andalucía, Vox ha presentado una petición desde la Mesa del Parlamento andaluz, solicitando toda la documentación relacionada con subvenciones y posibles expedientes de reintegro de FACUA.

"Su objetivo no es conocer información sobre nuestras subvenciones, porque las subvenciones que recibe FACUA, igual que reciben el resto de las organizaciones de consumidores se publica. Está publicado en las páginas oficiales. Las andaluzas están el BOJA. Y luego, el control de lo que hacemos con las subvenciones lo hace la propia Junta" aclara y condena el portavoz de la organización.

"La idea es moverlo para sembrar el rumor de que algo habrá, algo raro, algo sucio detrás de las subvenciones y de que seguramente hemos cometido irregularidades con el dinero público" interpreta Sánchez.

Lo que hace FACUA con el dinero público, ¿qué hace Vox?

Rubén Sánchez se pregunta si aquellos que les acusan de fraude estarán libres de pecado "me gustaría que a los dirigentes de Vox se les pusiera a todos un espejo delante y pudieran verse, y pudiera contarse y pudiera trascender qué han hecho ellos con el dinero público y si lo han recibido".

"Desde FACUA desde luego el dinero público los usamos para la lucha contra el fraude, para denunciar los fraudes que sufren los consumidores por parte de bancos, de eléctricas y aseguradoras, de compañías de telecomunicaciones, sirve para denunciar todos estos fraudes" declara el portavoz.

Para quienes no conocieran el dato, Sánchez le ha comunicado a ElPlural.com que la última subvención de dinero público que ha recibido por parte del Ministerio de Sanidad y Consumo de determinadas comunidades autónomas y determinados ayuntamientos ha sido de un millón de euros. El resto de dinero, un total de dos millones de euros, ha llegado de las cuotas de los socios que suman ya los 220.000. Por lo que el dinero público recibido por FACUA fue un tercio del total de ingresos que tuvo el pasado ejercicio.

"El año pasado conseguimos que las administraciones impusieran multas a empresas por fraudes por importe de cuatro millones de euros, es decir, por importe de cuatro veces el dinero público que recibimos el año pasado. Al final el dinero que recibe FACUA sea público o de nuestros socios sirve para prevenir el fraude, alertar de fraude, resolver problemas a los consumidores y que les devuelvan el dinero. También sirve para que podamos investigar los fraudes y ponerlos en conocimiento de las administraciones, provocando así que estas impongan multas que redundan en beneficio de toda la sociedad" aclara el portavoz.

Interponer demandas muchas veces "no merece la pena"

Preguntado sobre qué se puede hacer a nivel legal o judicial ante esta cacería, Rubén Sánchez explica que "ganar demandas por derecho al honor no es tan fácil". A pesar de su experiencia en llevar a cabo acciones judiciales por intromisión en el derecho al honor y la experiencia que también tiene FACUA, "es un tema complicado, llega un momento en el que incluso satura" revela.

"Si continuamente tienes a un montón de personas insultándote y lanzando mensajes en los que intentan promover el rumor de que cometes fraude o has cometido irregularidades... y tienes que poner una demanda judicial a cada una de esas personas, realmente representa tener muchos recursos para ello. Una demanda judicial no se prepara en un día. Una demanda judicial tiene mucho trabajo detrás. Así que nosotros, cuando pudimos, interpusimos cuatro demandas judiciales a Luis Pineda y a Ausbanc y ganamos las cuatro".

Las cuatro tuvieron mucha repercusión mediática, ya que una de ellas, FACUA consiguió que Luis Pineda tuviera que tuitear 30 veces durante 30 días que estaba condenado por difamación, además lo tuiteó desde la cárcel. "Otra condena para Pineda fue tener que llenar Sevilla y Málaga de carteles con el contenido de la sentencia, porque él también llenó Sevilla y Málaga de carteles con mi cara, llamándome delincuente" cuenta el portavoz.

Desgraciadamente, sigue siendo un trabajo muy laborioso y "llega un momento en el que valoras que no merece la pena, porque... qué más da ya que un juzgado condene a Hermann Tertsch dos o tres veces por haber insultado o difamado a Pablo Iglesias y a su padre".

Se lamenta Sánchez que al final la gente que difama tiene muchos recursos y continuarán haciéndolo a pesar de ser condenados, "esta gente tiene muchísimo dinero como para poder seguir difamando. ¿Tú crees que a Espinosa de los Monteros le iba a provocar algún perjuicio económico una indemnización que estableciera un juzgado de 5.000 o de 40.000 euros, si tiene una mansión".

"Que se pongan a la cola"

Desde FACUA lo tienen claro, Vox no serán los primeros ni los últimos en intentar acabar con ellos, "entre ellos ha estado Luis Pineda de Ausbanc, Miguel Bernad de Manos Limpias, hasta el propio Partido Popular" alegan. Ya que en la época en la que Ana Mato era ministra de Sanidad amenazó con ilegalizarles "por el hecho de que estábamos criticando los recortes en la educación y en la enseñanza pública, y nos dijeron que si continuábamos criticando esos recortes y posicionándonos políticamente en contra iban a proceder a nuestra ilegalización" expone.

"Somos una voz crítica contra determinadas políticas, somos contrarios a recortes de derechos sociales. Y como cada vez tenemos más repercusión social y cada vez somos más fuertes con más de 220.000 asociados, somos molestos para determinadas empresas y para determinados grupos políticos que son bastante poco tolerantes con el discurso de organizaciones que podemos defender derechos ciudadanos y luchar contra fraudes de empresas" confiesa Sánchez.

"A lo mejor esos partidos políticos están más interesados en recortar derechos y en favorecer a las empresas que cometen los fraudes con su política" sentencia finalmente.