El presidente de Bolivia, Evo Morales, ha anunciado este domingo que convocará nuevas elecciones generales y que renovará la totalidad de los miembros del Tribunal Supremo Electoral (TSE) tras el dictamen preliminar desfavorable de la Organización de Estados Americanos (OEA) sobre los comicios del pasado 20 de octubre, en el que se destacan "irregularidades" en el análisis de los datos.

"He decidido renovar la totalidad de los vocales del Tribunal Supremo Electoral y convocar a nuevas elecciones generales", ha anunciado Morales en una comparecencia pública retransmitida por la televisión pública boliviana.

"Convocar a nuevas elecciones nacionales que mediante el voto permitan al pueblo boliviano elegir democráticamente a sus nuevas autoridades incorporando a nuevos actores políticos", ha explicado Morales , que ha defendido "bajar la tensión" tras las protestas y movilizaciones de la oposición contra las últimas elecciones. "Todos tenemos la obligación de pacificar Bolivia", ha remachado.

El mandatario ha dicho que en las próximas horas la Asamblea Legislativa Plurinacional, de acuerdo con todas las fuerzas políticas, establecerá los procedimientos para renovar la totalidad de vocales del TSE, conforme exigía la oposición.

Protestas en las calles

Las protestas en Bolivia estallaron la misma noche de las elecciones presidenciales celebradas el pasado 20 de octubre por la suspensión repentina de la transmisión de los resultados oficiales justo cuando obligaban a una segunda vuelta entre Morales y el principal líder opositor, Carlos Mesa.

Cuando se retomó, casi 24 horas después, concedían la victoria en primera vuelta a Evo Morales, por lo que Mesa ha denunciado un "fraude gigantesco". Ambos llamaron a la movilización de los suyos, lo que ha derivado en disturbios. Al menos dos personas han muerto y más de 190 han sido detenidas en estas dos semanas.

En este contexto, Morales accedió a que la OEA, apoyada por países como España, México o Perú, realizara una auditoría electoral de carácter vinculante. Mesa, en cambio, no la aceptó porque dice que es fruto de un acuerdo unilateral entre el Gobierno y el bloque hemisférico sin tener en cuenta a la oposición.

El jueves y el viernes se amotinaron policías en las regiones de más arraigo de la oposición, primero para exigir demandas laborales y posteriormente en apoyo a las movilizaciones opositoras, y el sábado hubo amotinamientos incluso en La Paz y el Ejército tuvo que salir al paso para advertir que no reprimiría las protestas.

La OEA constata graves irregularidades

Este domingo finalmente se ha publicado el informe preliminar de la misión de la OEA que denuncia graves irregularidades en el proceso electoral y señala como "improbable" que Morales obtuviera el 10 por ciento de votos de ventaja necesario para evitar una segunda vuelta contra Mesa.

En su investigación, los auditores revelan que al menos uno de los servidores del sistema, inicialmente apartado para servir de base de datos de consulta para las autoridades electorales "no se utilizó para el fin sobre el cual el equipo fue notificado" y que los datos del sistema fueron desviados a un servidor externo, fuera de la red oficial, y cuya existencia fue omitida hasta precisamente la investigación de los auditores.

"Resulta extraño que se redirija el flujo de datos a una red foránea, no prevista ni documentada. Resulta extremadamente grave y afecta a la transparencia del proceso", según los auditores, que tampoco entienden la ausencia de documentos sobre la interrupción del TREP. Por todo ello, consideran que existió una "clara manipulación que afectó
tanto los resultados de dicho sistema, como los del cómputo final".

Actas bajo sospecha

Las actas electorales también han sido cuestionadas por los auditores tras efectuar un análisis pericial de una muestra de 333 documentos, en particular en las mesas donde el partido de Morales, el Movimiento al Socialismo (MAS) obtuvo porcentajes extraordinariamente altos de votos.

"Del análisis efectuado, se concluyó que 78 actas (23% de la muestra) presentaban irregularidades desde el punto de vista pericial. En algunos casos, se verificó que todas las actas de un mismo centro habían sido completadas por la misma persona", según el informe. De hecho, los auditores señalan que esa persona, en ocasiones, era precisamente el representante de mesa del partido de Morales, acreditado por partida doble como delegado principal del centro de votación.

Los auditores manifiestan en especial su incredulidad ante el porcentaje de votos favorables al MAS, que llegó a obtener el 100 por 100 de respaldo en algunos recuentos. "En algunos de estos documentos ni siquiera se había completado con un cero el campo correspondiente a los votos de los partidos opositores", apuntan. Además, la participación en algunas de esas mesas alcanzaba el 100%, "hecho prácticamente imposible".

El equipo de investigadores ha detectado también falta de correspondencia entre firmas de actas originales y las copias distribuidas a las autoridades y la OEA e incluso falsificaciones. En otras circunscripciones de Potosí, Chuquisaca y Santa Cruz, parte de la documentación "fue incendiada".