Juan Lobato Gandarias se convertirá en el próximo secretario general del PSOE de Madrid al haber ganado las primarias que los socialistas han celebrado este sábado 23 de octubre. Nacido en Madrid en 1984 (el próximo 4 de noviembre cumplirá tan solo 37 años), Lobato se ha impuesto al alcalde de Fuenlabrada, Javier Ayala, con un más del 60% de los votos emitidos.

Lobato asume el liderazgo de un partido muy tocado -y casi hundido- tras la debacle electoral del pasado electoral del 4 de mayo, en la que los socialistas obtuvieron el peor resultado de su historia perdiendo 272.000 votos y 13 diputados. El PSOE de Madrid dejó de ser la fuerza más votada de la izquierda en beneficio de Más Madrid y Ángel Gabilondo, quien solo dos años antes había ganado las elecciones autonómicas, se vio obligado a dimitir.

¿Por qué confían en Lobato?

El PSOE iniciaba entonces su última gran crisis en Madrid. Medio año después, los socialistas confían en el exalcalde de Soto del Real para reflotar una formación política incapaz de gobernar en la región desde 1995 pese a los continuos escándalos de corrupción protagonizados por el Partido Popular. Tres razones han pesado principalmente para que Lobato se haya alzado con la victoria.

1. Su éxito como alcalde

Su éxito cosechado como alcalde ha sido determinante para alzarse con la victoria en las primarias de este sábado. Y es que Lobato consiguió convertirse en 2015 en el primer regidor socialista que tuvo Soto del Real en 76 años, desde que el anterior, el jornalero Eugenio Candelas, fuera fusilado en 1939. Un hito muy apreciado por los socialistas en la Comunidad de Madrid.

Entonces Lobato tenía 30 años, pero llevaba doce años ejerciendo como portavoz del Grupo Municipal Socialista y forjando con paciencia un proyecto político que en 2019 le permitió hacerse con una mayoría absoluta incontestable (59,30 por ciento de los votos emitidos).

2. El ‘Equipo Lobato’ con apoyo de Ferraz

El político madrileño es consciente que ahora no dispone de 12 años para rearmar el partido, sino de tan solo 20 meses para hacer del PSOE un partido competitivo y plantar cara a Isabel Díaz Ayuso. Para ello Lobato cuenta con el respaldo del autodenominado ‘Equipo Lobato’ liderado por Marta Bernardo y en el que están integrados representantes de algunos municipios en los que el PSOE ha conseguido gobernar pese a jugar en terreno hostil como Alcobendas, Alcalá de Henares, San Sebastián de los Reyes, Coslada, San Fernando, Manzanares el Real y San Martín de la Vega.

Precisamente la transversalidad de su equipo, abarcando desde el simanquismo hasta antiguos partidarios de Tomás Gómez, fue el motivo definitivo para contar con el visto bueno de Ferraz -convirtiéndose extraoficialmente en su candidato- y consiguiendo el cierre de filas en torno a su figura del presidente del Gobierno Pedro Sánchez.

3. A por el ‘Madrid de las piscinas’

En contra de postulados más izquierdistas, que Lobato haya fijado entre sus principales prioridades captar el voto joven y de los profesionales liberales también ha sido valorado positivamente por los barones locales del partido en Madrid, conscientes del desastre de haber renunciado a hacer campaña en los PAU de Las Tablas o Sanchinarro o las ciudades de la A-6: un terreno abonado para que Isabel Díaz Ayuso fuese reelegida presidenta y se apropiase del caladero de Ciudadanos.

Lobato no renuncia al ‘Madrid de las piscinas’ y no ha escondido su intención de que el PSOE se adapte al Madrid del año 2021, con un partido con una posición política más centrada que consiga llegar sectores de la sociedad madrileña que en la última década han dado la espalda a los socialistas madrileños.