El Consejo de Ministros aprobará este martes un crédito de hasta 1.000 millones de euros para el Ministerio de Defensa, pese a las reticencias de Unidas Podemos, tal como ha adelantado El País. El objetivo es iniciar cuanto antes un aumento progresivo del gasto militar hasta llegar al 2% del Producto Interior Bruto (PIB) en 2029. Este incremento en el gasto militar fue un compromiso que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, adquirió en la Cumbre de la OTAN que se celebró en Madrid la pasada semana.

Unidas Podemos se ha mostrado reiteradamente en contra de este incremento en gasto militar, así lo han dejado claro varios de sus líderes. “Gastarse el dinero en armas por exigencia de una potencia extranjera en lugar de invertirlo en una mejor en sanidad, educación y más protección social no forma parte de los Presupuestos que nuestro país necesita”, ha dicho Ione Belarra, secretaria general de Podemos.

En cambio, Pedro Sánchez ha insistido en varias ocasiones en la necesidad de este refuerzo armamentístico, asegurando que la seguridad hoy en día no está garantizada, en clara referencia a la guerra en Ucrania tras la invasión rusa. Así, Sánchez ha justificado que el contexto apremia y que, además, la influencia de los países en el tablero global dependerá de sus inversiones en Defensa. Tal como informan fuentes de La Moncloa, "el Gobierno va a cumplir con su responsabilidad y solidaridad para fortalecer la seguridad y la capacidad de disuasión europeas frente a la amenaza real que representa Putin", poniendo también en valor que Sánchez "ha sido claro y diáfano".

"Todos los departamentos ministeriales fueron informados de la propuesta en la reunión de la Comisión General de Secretarios de Estado y Subsecretarios que se celebró la semana pasada. La propuesta fue estudiada y validada sin que se produjera ningún tipo de intervención en contra", aseguran las mismas fuentes.

Los acuerdos de Sánchez en la cumbre de la OTAN que el Congreso de los Diputados deberá aprobar son dos: el incremento en gasto en Defensa hasta el 2% del PIB y el despliegue de dos nuevos buques destructores estadounidenses en la base de Rota (Cádiz). Y ninguno de los dos atesora el aval de Unidas Podemos, formación que también es contraria a la Alianza Atlántica.

Ante la confrontación entre socios, Margarita Robles, ministra de Defensa, ha respondido a los líderes morados: “Yo le diré a la señora Belarra que pregunte a la vicepresidenta Yolanda Díaz a ver si ella dice en Ferrol que se dejen de construir ahí las fragatas F-110 que están creando muchos puestos de trabajo (…) En la vida se aporta desde lo positivo y no desde la descalificación. Ellos sabrán lo que tienen que hacer”.

“España no está en guerra”

En el Consejo de Coordinación de Podemos, Ione Belarra ha esgrimido que las prioridades en las cuentas del Gobierno para el próximo año no pasan por aumentar la inversión en defensa, sino en fortalecer el sistema de cuidados, blindar del poder adquisitivo de los ciudadanos, la contención de la inflación o la inversión en sanidad o educación: “Unas urgencias que son diferentes al planteamiento que se ha hecho estos días de duplicar el gasto militar en España, que ya está en niveles récord”.

“España no está en guerra, está sufriendo las consecuencias económicas y sociales de una guerra en Europa”, ha remarcado, añadiendo: “Lo que necesita la gente de nuestro país no es comprar bombas ni aviones de combate. Es emplear los recursos y la riqueza que producimos entre todos para protegernos del impacto económico de esta situación”.