El PSOE tiene claro que quiere que Pedro Sánchez sea investido presidente del Gobierno cuanto antes y que no se repitan las elecciones. Por eso, la idea que maneja el partido socialista es que Francina Armengol, presidenta del Congreso de los Diputados, anuncie la fecha de investidura este jueves o viernes, según fuentes socialistas consultadas por ElPlural.com.

De esta manera, las fechas escogidas para que Sánchez se presente a la investidura serían el martes 7 de noviembre y el miércoles 8 de noviembre. En concreto, el martes 7 tendrá lugar la primera sesión del debate, relegando la primera votación, para la que Sánchez requiere de mayoría absoluta, al miércoles 8.

Asimismo, y en relación con las fechas de la investidura, fuentes socialistas también han subrayado a este medio que el PSOE no contempla que Sánchez no logre ser investido en una primera votación, ya que confían en tener los 176 escaños necesarios para alcanzar la mayoría absoluta.

Para ser más precisos, los socialistas confían en que los acercamientos con Junts produzcan un efecto dominó para sellar los pactos con ERC, PNV, Bildu y BNG; sumando 178 votos a favor -179 en caso de seducir a Coalición Canaria- y superando la frontera de la absoluta sin necesidad de celebrar una segunda votación.

A este escenario se suma el proceso de consulta a la militancia del PSOE, que está votando a lo largo de toda esta semana los pactos del PSOE con Sumar y el resto de formaciones políticas que apoyan la investidura de Sánchez. Los resultados se conocerán este fin de semana y serán vinculantes para el partido socialista, que espera una alta participación y un respaldo mayoritario a los acuerdos alcanzados. El PSOE quiere mostrar así su cohesión interna y su compromiso con la formación de un gobierno progresista y estable.

¿Por qué la semana del 6 de noviembre?

Por otra parte, tal y como viene informando ElPlural.coim, esta semana ha sido la escogida por varias razones de peso, entre ellas la celebración de dos citas de calado internacional a las que el líder del Ejecutivo quiere asistir ya con la confianza del parlamento español en el bolsillo y oficializado en la Cámara Baja. 

En primer lugar, está el Congreso del Partido Socialista Europeo (PES) en Málaga los próximos 10 y 11 de noviembre. En este encuentro, clave para Europa, se reunirán los primeros ministros, jefes de Estado, líderes, activistas y militantes de la familia socialista procedentes de toda Europa. Será Málaga la ciudad que acogerá el próximo mes de noviembre un Congreso en el que los socialistas definirán sus prioridades de cara a las elecciones europeas que se celebrarán en la primavera de 2024.

Y, en segundo lugar, el 27 de noviembre tendrá lugar la Cumbre de Barcelona, donde Sánchez se dará otro baño de popularidad entre líderes europeos en la reunión de la Unión por el Mediterráneo (UpM). En fueros socialistas ven este evento como el escenario idílico para que Sánchez obtenga el respaldo de los máximos mandatarios europeos toda vez se le aúpe como presidente del Gobierno de España por otros cuatro años.

El PSOE presentará en el Congreso la Ley de amnistía la próxima semana

Una de las condiciones que Carles Puigdemont fijó en septiembre para apoyar la candidatura de Pedro Sánchez era registrar y aprobar la ley de amnistía antes de la coronación del jefe del Ejecutivo en funciones. Dicho y hecho. Al menos así lo transmiten voces de peso del Partido Socialista. En el marco de la jura de la Constitución de la princesa Leonor y un día después del encuentro con el dirigente neoconvergente, en el PSOE ya se baraja registrar la futura normativa antes del debate de investidura y que ésta cuente con la rúbrica de todos los Grupos Parlamentarios que conformarán el llamado “bloque progresista”. Es decir, PSOE, Sumar, Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), Junts, EH Bildu, PNV y BNG.

La reunión con Puigdemont ha provocado un acelerón en las negociaciones. Tras meses de estancamiento, los actores han pisado el acelerador ante el calor asfixiante del foco mediático. Un encuentro catalizador que, según relatan, que ha dado vida a las conversaciones. Tanto es así que en fueros socialistas no descaran que la normativa se registre incluso esta misma semana. Todo ello, mientras en Ferraz esperan que se desatasque la vía de ERC; otro puntal crucial para la unción de Sánchez. Los republicanos admiten que se han intensificado los encuentros bilaterales, aunque afean al PSOE que quedan muchos flecos por pulir; especialmente en el apartado económico del eventual acuerdo.