Este martes, el Pleno del Congreso de los Diputados va a debatir una proposición no de ley del Grupo Parlamentario Socialista, cuyo objetivo es impulsar la regulación de las redes sociales para prevenir problemas de salud mental en la juventud. El diputado y secretario general de Juventudes Socialistas Víctor Camino ha puesto en valor la iniciativa por la necesidad de promover medidas que limiten los riesgos que las redes sociales están suponiendo para el bienestar mental de la juventud.
En concreto, desde el PSOE proponen “una normativa que garantice que los servicios de las redes sociales sean éticos, eviten técnicas de manipulación y ponga coto a las características nocivas”, además de promover la “creación de nuevas herramientas accesibles en las aplicaciones sobre desintoxicación digital, para poder gestionar el contenido y el tiempo que se pasa en la aplicación.
Asimismo, los socialistas consideran que es fundamental “la detección y el combate de las vulnerabilidades de las que se aprovechan las plataformas para captar la atención de los usuarios, sobre todo de las personas más jóvenes, para monetizar sus datos”.
Denuncian también la lacra de la desinformación en redes y sus efectos en la calidad democrática de los países. Según la iniciativa a debate este martes, los dispositivos electrónicos suelen extraer datos para predecir patrones, mecanizar comportamientos y generar adicción con un fin económico.
No obstante, el Grupo Socialista aplaude las acciones del Gobierno plasmadas en el anteproyecto de ley de protección de menores. Según el texto, los menores de 16 años no podrán ni acceder ni registrarse en redes sociales y los menores de 18 tampoco podrán acceder a espacios digitales que utilicen mecanismos aleatorios de recompensa. Por otra parte, todas las aplicaciones deberán incluir obligatoriamente herramientas de control parental para proteger a los menores. Un avance que pone el foco en el uso de móviles en las escuelas o la contención del acoso virtual en entornos digitales.
Impacto negativo de las redes sociales en la autoestima y el bienestar
Aunque las plataformas digitales han impactado de forma beneficiosa en la sociedad, a través de nuevas formas de comunicarse y de agilizar tareas, varios estudios advierten del peligro que causan las redes sociales en la autoestima y en el bienestar, especialmente en la juventud, y es que estas pueden ser utilizadas como una herramienta con la que ejercer acoso o violencia.
Según el informe Social Media and Youth Mental Health 2023, pasar más de tres horas diarias en redes sociales duplica el riesgo de padecer problemas mentales, y la nueva generación “centennial” hace, en más del 85% de los casos, un uso mayor a cinco horas diarias. Estos datos muestran la necesidad de democratizar la digitalización y hacer un buen uso de los dispositivos electrónicos para que dejen de afectar negativamente a la salud mental de la juventud.
En la propuesta, los socialistas también señalan que aunque la OMS no considera aún como trastorno la adicción a internet, al móvil o a las redes sociales, los datos demuestran que el mal uso de los dispositivos electrónicos perjudica el bienestar y, especialmente, la salud mental de los jóvenes. Según datos del Ministerio de Sanidad en 2022, el 10,8% de la población entre los 15 y los 24 años decía hacer un uso problemático de internet, siendo el grupo de población más afectado.
Y según un estudio de la Fundación ANAR, entre 2019 y 2022 aumentó la implicación de las tecnologías en las conductas suicidas (del 33,5% al 51,5%). En ocasiones se usan como herramienta para provocar malestar o para ejercer violencia sobre otras personas (sextorsión, grooming o ciberacoso), también como medio para fomentar la ideación.
Con esta proposición no de ley, el Grupo Parlamentario Socialista tiene como objetivo reducir el impacto que el mal uso de las redes sociales tiene sobre la adolescencia y la juventud, ampliando el derecho digital a no ser molestado y así como asegurar que estas plataformas desarrollan productos y servicios digitales éticos por defecto, de manera que no tengan patrones opacos ni diseños engañosos o adictivos, ni en definitiva, utilicen técnicas de manipulación que apelan al inconsciente del usuario para tomar decisiones potencialmente perjudiciales para la protección de sus datos personales o para su salud mental.
Acciones para reforzar la protección digital de la salud mental
En concreto, esta proposición no de ley busca implantar las siguientes acciones para reforzar la protección digital de la salud mental de la juventud:
- Programas de formación para las familias con el objetivo de ampliar sus capacidades en el conocimiento de los riesgos y la gestión del uso que hacen sus hijos e hijas de las redes sociales.
- Detección y combate de las vulnerabilidades que emplean las plataformas para captar la atención de las personas jóvenes con el fin de monetizar sus datos.
- Herramientas accesibles en las aplicaciones sobre desintoxicación digital en la que los usuarios puedan gestionar cuánto tiempo pasan en la aplicación y qué tipo de contenidos se muestran.
- Prohibición de las características de diseño nocivas como el deslizamiento sin fin de contenido o "scroll infinito", las notificaciones constantes en tiempo real o la reproducción automática de vídeos o juegos.
- Fomento desde las administraciones públicas de buenas prácticas, como desactivar todas las notificaciones, el bloqueo automático de la pantalla, sistemas de recomendación cronológicos o móvil en escala de grises para reducir el tiempo de consumo.
- Promoción de normativa que garantice que los servicios de las redes sociales sean éticos por defecto y renuncien a adoptar patrones oscuros o técnicas de manipulación que apelan al inconsciente del usuario para que torne decisiones potencialmente perjudiciales para la protección de sus datos personales".
- Impulsar una recomendación de no uso de 'smartphones' hasta los 14 años y, u postergar el acceso a acceso a internet y redes sociales hasta los 16".