La equidistancia del PP con los ataques de Israel a Palestina desde que el conflicto se recrudeciera tras la ofensiva de Hamás no es nueva, aunque a medida que ha ido pasando el tiempo los populares hayan querido intentar cerrar filas y condenar las operaciones israelíes. Tampoco son novedad los varapalos del ministro de Transporte, Óscar Puente, a los políticos de cualquier signo ideológico, pero especialmente de la derecha.

Así las cosas, el responsable de este departamento acostumbra a cargar contra Alberto Núñez Feijóo, Isabel Díaz Ayuso y un largo elenco de actores políticos. En esta ocasión, y con motivo de la situación en Oriente Medio, Puente no ha dudado en criticar al gallego.

Lo ha hecho con la fina ironía que a veces le caracteriza, y aprovechando la reunión del responsable del principal partido de la oposición con el embajador de Palestina en España, Husni Abdel Wahed. “Palestina tiene derecho a la paz, a la prosperidad, y a que se respete el derecho humanitario”, escribía después del encuentro Feijóo en su cuenta de X, antiguo Twitter, añadiendo a continuación que Palestina “no es Hamás” y que “a las organizaciones terroristas hay que derrotarlas”.

“Porque no quiere”

Puente ha vuelto a rescatar la idea que quiso transmitir el presidente del PP cuando vino a señalar, durante el debate de investidura de Pedro Sánchez, que no era presidente del Gobierno “porque no quiere”. De este modo, el ministro de Transportes ha respondido a la imagen en la que aparece Feijóo con el embajador de Palestina con un mensaje que, si bien recurrente, sigue sin dejar indiferente a la derecha: “No es Nobel de la Paz porque no quiere”.

Y se trata de una frase recurrente porque Puente la ha empleado en varias ocasiones contra el presidente del PP. Una de estas veces llegó, por ejemplo, hace apenas diez días, cuando el expresidente de la Xunta se dirigía a Ourense para cerrar la Interparlamentaria de su formación. En aquel momento, el PP escribía: “Nuestro Presidente en el “Falcon” destino a Ourense. Qué curioso que sea el mismo que el de todos los españoles con los que comparte trayecto”. A lo que el ministro de Transportes respondía: “No va en el Falcon porque no quiere”.

Y así, suma y sigue. Sin ir más lejos, cuatro días después Puente volvía a emplear la que se convirtió en la muletilla más célebre de la sesión de investidura de Sánchez a raíz de una propuesta educativa de Feijóo. En un acto celebrado en León, el líder del PP asumía su “compromiso” para impulsar una EBAU “común” a partir de 2025, encontrando en su idea la respuesta inmediata del ministerio de Educación, quien la tachó de frivolidad y, como ya es habitual, del responsable de Transportes, que repetía el modus operandi. “No es ministro de Universidades porque no quiere”, estimaba.

Posición del PP con Palestina

Las idas y venidas del PP con el conflicto entre Israel y Palestina han sido la tónica habitual del partido, y es que, aunque los populares quieran condenar el asesinato de civiles en Gaza, la formación de Génova 13 ha criticado en numerosas ocasiones la posición del Gobierno de España, que siempre ha abogado por reconocer el estado palestino.

Hay que subrayar que tanto el líder de los populares como la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso -esta segunda con más dureza- han afeado a Pedro Sánchez su posición en el conflicto. El gallego llegó a tildar de “ocurrencia” la intención del PSOE, sin tener en cuenta que su partido había respaldado una resolución en este sentido propuesta por los socialistas.

Pues bien, pese a ello, Feijóo defendió: “Hemos visto que una organización terrorista ha felicitado al señor Sánchez y a su Gobierno, y es evidente que nosotros no nos vemos reflejados en su política exterior”. Y consideraba que el líder del Ejecutivo no había consultado esta postura “con nadie” y que era una “ocurrencia”. “Sería bueno que el señor Sánchez le comente a sus colegas de la Unión Europea si están de acuerdo con ello, y anticipo que no”, opinaba en noviembre del año pasado mientras pedía al presidente no “crear un conflicto diplomático en un contexto de un conflicto bélico”.

Mucho más dura ha sido históricamente y sigue siendo Ayuso. Esta misma semana, la presidenta de la Comunidad de Madrid señalaba en un acto en memoria al Holocausto que “el antisemitismo se reaviva a la mínima revisitándose de antisionismo cuando se pone en tela de juicio la existencia del estado de Israel”: “No ha dejado de propagarse a través de terminales políticas y mediáticas por el mundo entero”.

Otra vez. Disfrazadas de supuestas causas nobles y justas, y así desprecian y arremeten contra el derecho de Israel a ser la casa de los judíos”, considera la baronesa regional. “De nada sirve conmovernos por los judíos muertos mientras se desprecia a los vivos. A Israel se le ha negado hasta acuerdos de paz en la zona porque esa paz significa reconocimiento y estabilidad, y muchos lo que quieren es que desaparezca”, añadía. Los datos, sin embargo, evidencian una respuesta sobredimensionada por parte de Israel al ataque de Hamás, y es que son ya más de 27.000 los civiles muertos en la Franja mientras Israel sigue limitando la ayuda humanitaria.