El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha comenzado la semana sentándose en Onda Cero con Carlos Alsina. En la entrevista se ha hablado de muchas cosas, desde los pactos con Bildu hasta la caída de Irene Montero de Sumar, pasando por la negativa de Feijóo a debatir cada semana, pero ha tenido también momentos en los que se notaba la tensión entre el entrevistador y el presidente del Ejecutivo.

Si no el más destacado, al menos uno de los más reseñables es el que ha tenido lugar cuando el locutor ha preguntado el secretario general socialista a qué medios se refiere cuando hace alusión a “gentes de programas de máxima audiencia que solo se representan a ellos mismos”, que “pontifican e insultan sin derecho a réplica” y que “se van a inventar barbaridades copiando los métodos de los maestros norteamericanos”.

Sánchez se ha mostrado tajante con la cuestión y ha sostenido que “cualquier analista es consciente de que hay una desproporción en la representación de voces progresistas”, a lo que Alsina le ha insistido: “¿Por qué no lo dice?”. “Porque soy presidente del Gobierno. En privado se lo digo”, ha respondido el nuevamente candidato socialista con una expresión que, a juicio del periodista, es “tirar la piedra y esconder la mano”.

Derechización de los medios

La frase a la que hacía alusión Alsina se enmarca en el discurso que pronunció el presidente del Gobierno frente a los suyos apenas había dado tiempo a digerir la derrota del 28M y a comenzar a focalizarse en la jornada del 23 de julio. Actuando como líder, el dirigente socialista asumió como suyos los resultados, dio la enhorabuena a quienes habían conseguido representación y las gracias a los que se habían quedado fuera.

Previsor, advirtió de la guerra sucia que se venía por parte de la derecha, teniendo en cuenta lo simple del discurso popula, construido a base de “bulos”. “Veremos en programas de máxima audiencia a gentes que solo se representan a ellos mismos pontificar e insultar sin derecho a réplica. Se van a inventar barbaridades. Están copiando los métodos de sus maestros norteamericanos”, señalaba concretamente, recordando las teorías de pucherazo alentadas desde los sectores de Ayuso o la campaña centrada en ETA pese a que hace una década que la banda armada desapareció.

Feijóo, Irene Montero o Bildu, en la entrevista con Alsina

Sánchez ha respondido a todo lo que le ha planteado el conductor de Más de uno durante una conversación de aproximadamente una hora y en la que se han puesto sobre la mesa nombres como el de Alberto Núñez Feijóo, Irene Montero o Bildu.

Respecto del primero, el líder socialista ha recordado los acuerdos alcanzados en los comicios locales y autonómicos entre la derecha y la extrema derecha, a partir de los cuales el presidente ha presagiado que “lo único que sabemos del futuro gobierno de Feijóo es que su vicepresidente será Abascal”.

Manteniendo la senda, Sánchez ha tirado por tierra el discurso del PP contra la formación abertzale, utilizado por el equipo de la oposición para centrar el relato. Sobre esto, ha recordado que el equipo socialista se ha apoyado más veces en los populares que en los vascos, pese a que los primeros “no lo ponen fácil”. Asimismo, ha recordado que “no hay ministros de Bildu en el Gobierno de España” y que “tampoco hay acuerdo de legislatura con ellos”.

Nos hemos apoyado más veces en el PP que en Bildu (…) El PP ha aprobado 51 decretos, por los 48 de Bildu”, ha esgrimido en unas declaraciones en las que ha tenido que volver a dejar claro que “los supuestos enemigos de España en los últimos cinco años han hecho mucho más por los españoles que lo que han hecho todos los patrioteros de pulsera juntos”.

Sobre si está orgulloso de la gestión de la ministra de Igualdad, en lo que ha sido otro de los puntos calientes de la entrevista, Sánchez ha reconocido que “ha habido discrepancias como la ley del solo sí es sí” y que intentó persuadir a la diputada de Unidas Podemos sobre ello. Tras no hacer entrar a razón a la ministra, decidió que los socialistas llevaran adelante una reforma de la normativa que salió con el apoyo del PP.

Pese a esto, ha ensalzado la labor del ministerio de Igualdad, que considera necesario al considerar como tal la agenda feminista. “Es una tarea pendiente de la España progresista tener un discurso integrador”, ha subrayado poniendo el acento, eso sí, en la necesidad de que los hombres se sientan parte del movimiento.