El secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal. EFE



Este lunes, la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, estuvo muy poco afortunada a la hora de defender la extraña relación laboral que ha mantenido su partido con Luis Bárcenas, desde abril de 2010 hasta el pasado enero. En su empeño por negar que el extesorero mantuviera un vínculo con la formación, la número dos de los populares insistió en la versión de que se le pagaba “una simulación…una indemnización diferida”. Lo que evitó decir es que se hizo una simulación de contrato, dándole de alta en la Seguridad Social, cuando realmente Bárcenas ya no trabajaba para el PP, es decir, se pudo cometer una infracción muy grave.

"La indemnización que se pactó, fue una indemnización en diferido, y como fue una indemnización en diferido... en forma, efectivamente, de simulación de... simulación, o lo que hubiera sido en diferido… en partes de una.. de lo que antes era retribución tenía que tener retención a la Seguridad Social... Es que si no hubiera sido... Ahora se habla mucho de pagos que no tienen retención a la Seguridad Social, ¿verdad? Aquí se quiso hacer como hay que hacerlo, con la retención a la Seguridad Social. (...) Así fue como se pactó", afirmó Dolores de Cospedal.



La Ley de Infracciones y Sanciones en el Orden Social
“Simulación” es la palabra que utilizó Cospedal de manera desafortunada para el PP, porque precisamente es el término que aparece recogido en la Ley de Infracciones y Sanciones en el Orden Social cuando define como muy grave la apariencia de una relación laboral.

Castiga simular un contrato laboral
Según El País, el artículo 23.1 en su apartado b de la mencionada ley, apunta que se considerará una infracción muy grave “incrementar indebidamente la base de cotización del trabajador de forma que provoque un aumento en las prestaciones que procedan, así como la simulación de la contratación laboral para la obtención de prestaciones”.

El pago de las cuotas de la Seguridad Social a Bárcenas
La infracción se habría cometido al pagar a Bárcenas las cuotas de la Seguridad Social, ya que, según asegura el PP, el extesorero ya no trabajaba para el partido. Ayer, la propia Cospedal lo dijo en reiteradas ocasiones durante su rueda de prensa. El Partido Popular rellenó los boletines de cotización, conocidos en los departamentos de recursos humanos como TC y que son imprescindibles para dar de alta a un trabajador en la Seguridad Social. Al hacerlo, el partido reconoció que Bárcenas era empleado suyo cuando en la realidad no lo era. O al menos esto es lo que Génova afirma.