Desde el pasado domingo, decenas de personas se han venido manifestando en la zona de Núñez de Balboa de Madrid, en el barrio de Salamanca. Estos vecinos se congregan para reclamar la dimisión del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, por su gestión de la crisis provocada por el coronavirus. Gritos de “libertad” y una sonada cacerolada son los protagonistas de estas concentraciones.

Estas manifestaciones se vienen desarrollando en la calle, sin guardar las medidas de seguridad y saltándose las órdenes del Ejecutivo. Entre los manifestantes de este jueves ha resaltado una de las vecinas, que ha colgado en su terraza una pancarta, clara y concisa: “La terrible gestión del Gobierno no es excusa para ponernos en peligro. Por favor, manifestaos desde casa”.

Esta versión de la protesta contrasta con la que cada día se ha visto en las calles del madrileño barrio de Salamanca, donde los vecinos se congregan por las calles. Ante esto, la Delegación de Gobierno en Madrid ha desplegado hoy un dispositivo en la calle Núñez de Balboa para hacer cumplir la Ley después de que ayer trece vecinos fueran identificados para propuesta de sanción por saltarse la obligación del distanciamiento social. Por su parte, el delegado de Gobierno en Madrid, José Manuel Franco ha indicado: “Una cosa son las caceroladas que todo el mundo tiene derecho a manifestare como quiera, pero otra cosa es incumplir las medidas del estado de alarma. Nosotros, a través de la Policía, tratamos de que se cumpla la Ley para mantener la distancia y que no se produzcan aglomeraciones”.