El pasado noviembre, tras ganar Rajoy las elecciones generales, Cameron le llamó para felicitarle por su victoria y, de paso, le ofreció su receta económica, la que está aplicando en Reino Unido para superar la crisis. Le aconsejó reducir el déficit y reformar el mercado laboral. El líder del PP reconoció entonces que “sigue de cerca las medidas de política económicas tomadas por el británico”, así que cuando llegó a la Moncloa se puso manos a la obra y aplicó la receta.

Reducir la deuda, como máxima
Tras hablar con Rajoy, en un encuentro con empresarios británicos, Cameron defendió que “hay que reducir la deuda para crecer”. De esta manera refutó la idea de otros políticos que piensan que hay que estimular la economía incluso a costa de un aumento del déficit público para salir de la crisis y encontrar el camino al crecimiento. "El mejor estímulo para la economía es reducir los costes de financiación del país", insistió Cameron.

Un refuerzo para Cameron
La afinidad de Rajoy con Cameron era tal que los medios británicos interpretaron su llegada a la Moncloa como un refuerzo a Cameron para compensar el liderazgo de Alemania y Francia en la Unión Europea.

La entrevista en El País
El 31 de octubre de 2010, en una entrevista de El País Mariano Rajoy, líder de la oposición, dejó bastante claro lo que haría si llegaba al Gobierno: “El plan de Cameron da confianza, yo haría algo similar en España”, afirmó.

En aquella entrevista, Rajoy destacó del plan de Cameron su “firme voluntad de reducir el déficit público” y “la prioridad” que, según él, daba a la partida presupuestaria dedicada a “los grandes servicios públicos fundamentales, la Educación y la Sanidad”. Algo que, sin embargo, Rajoy no ha respetado porque son estas partidas las que ha recortado más.

¿Qué hay qué hacer?
El entrevistador le preguntaba a Rajoy qué había que hacer para generar empleo y crecer. A lo que Rajoy contestaba: “Yo creo que hay que hacer algo similar a lo que ha hecho Cameron, que en cierta manera lo hicimos nosotros, lo recuerdo perfectamente porque estaba allí, claro, en un Consejo de Ministros antes del verano de 1996. Tener un plan, presentarlo a las Cortes Generales, que se debata ese plan, conseguir la mayoría; plan para cuatro años y a partir de ahí pues cuatro o cinco grandes medidas. Algunas serían principios y otras grandes medidas: lo primero es priorizar. Yo creo que en este momento en España, cuando el problema fundamental es el paro, lo que hay que hacer es ayudar a quienes pueden generar riqueza y puestos de trabajo. Creo que las pequeñas y medianas empresas, sobre todo, y los trabajadores autónomos, han sido maltratados en los últimos tiempos. Y después –continuaba Rajoy- hay tres o cuatro cosas capitales. Primero: objetivo básico y hay que cumplirlo, reducir el déficit público y la deuda pública”.