El Gobierno ha aprobado este martes en el seno del Consejo de Ministros la 'ley trans' que, fusionada finalmente con la LGTBI, permite la autodeterminación de género para las personas transexuales sin la necesidad de presentar un informe que les diagnostique disforia de género.

La norma -que ha tensionado a los socios del Ejecutivo en los últimos años- sale adelante en la semana del Orgullo y contempla la autodeterminación de nombre y sexo de las personas transexuales en el Registro Civil a partir de los 16 años sin requisitos.También podrán cambiar de sexo las personas de entre 14 y 16 años -aunque estas con consentimiento de familiares o tutores legales- y las personas de entre 12 y 14 años mediante autorización judicial.

Con la aprobación de esta ley concluye una negociación que comenzó el pasado mes de marzo, cuando el ministerio de Igualdad, encabezado por Irene Montero, hizo público el texto que había redactado con el objetivo de "despatoligizar" al colectivo y eliminar los trámites que actualmente tienen que seguir las personas trans para poder llevar a cabo este trámite.

En las últimas semanas se han intensificado las negociaciones entre PSOE y Unidas Podemos gracias al empuje del colectivo LGTBI de una ley que pone fin también a la derogación de la orden que aprobó el PP hace siete años y que excluía a las mujeres lesbianas y bisexuales de las técnicas de reproducción asistida. Asimismo, impedía a las parejas de mujeres afiliar a sus hijos e hijas en el Registro Civil si no estaban casadas. Desde este momento ellas y también las personas trans con capacidad de gestar quedan incluidas en las técnicas o procesos de reproducción asistida. 

El Consejo de Ministros ha dado luz verde a la ley pese a las diferencias que en los últimos años han reflejado los socios de Gobierno en diferentes cuestiones. Una de ellas era la que tenía que ver con el cambio de sexo legal, que desde las filas socialistas en un principio pedían, se hiciera con testigos u otro tipo de documentación. 

Esta normativa reforma la de 2007 que permitía el cambio de sexo previo diagnóstico y que en su día supuso un paso importante, aunque ya considerado insuficiente por el colectivo, en derechos de las personas trans.