Alberto Núñez Feijóo lo confirmó este mismo miércoles y oficializó su postulación para presidir el Partido Popular tras el congreso del próximo mes de abril. El por ahora presidente de la Xunta, desde los micrófonos de Herrera en COPE, no se ha cerrado a alcanzar acuerdos con el PSOE de Pedro Sánchez y ha reincidido en la diferenciación con Vox, subrayando que “no somos lo mismo”.  

El precandidato popular ha dejado la puerta abierta a la consecución de pactos de Estado con el PSOE, siempre y cuando se encamine a la protección de "principios constitucionales, europeístas y atlantistas”. De hecho, Feijóo asegura que tienen la “obligación de escuchar y reflexionar” sobre estas propuestas. Sin embargo, lamenta que “nunca las hemos tenido”.

Asimismo, Feijóo aventura que dentro de la propia coalición de Gobierno es complicado alcanzar acuerdos transversales como los que propone. En cualquier caso, ha avanzado que, si Sánchez consigue atraer a sus socios hacia los postulados anteriores, el Partido Popular “estará sentado y será el último en levantarse” de la mesa. De hecho, estima que la posición de la formación con la guerra de Ucrania supone un “mensaje muy claro”.

PP y Vox “no son lo mismo”

Otra de las dificultades a las que tuvo que hacer frente la dirección de Pablo Casado fue el auge de Vox. La ultraderecha de Santiago Abascal emergió con fuerza en 2018 y, desde entonces, ha condicionado el día a día del Partido Popular, entablando una extraña relación que traspasaba la ciclotimia.

PP y Vox no somos lo mismo. Nunca hemos sido antiautonomistas o euroescépticos

El propio Feijóo ha sido de los pocos estandartes del Partido Popular que no sólo ha doblegado con solvencia el poder de la ultraderecha, sino que ha evitado cualquier tipo de influencia. El presidente de la Xunta siempre ha mostrado su rechazo hacia Vox, corrigiendo el camino marcado por Génova. Su postura con el partido de Abascal, de hecho, le granjeó la fama de “nacionalista” e “independentista gallego”.

En cualquier caso, preguntado por la estrategia que adoptaría un PP gobernado por Feijóo, el gallego ha dejado claro que no comparte el discurso ultraderechista, poniendo el foco de su respuesta en que PP y Vox “no son lo mismo”. “Nunca hemos sido antiautonomistas o euroescépticos”, ha aseverado.

Por ello explica que cuantos más votos tenga Vox “más oportunidades tendrá el PSOE de mantenerse en el Gobierno”. Feijóo apuesta por “combatir a Vox” convenciendo a los ciudadanos de que es “necesario unirse y tener grandes mayorías”. “Hemos de captar a los votantes de Vox para que no sea una amenaza para un partido de Gobierno de centro derecha. Cuanto más dividamos el voto, más gobierno del PSOE habrá”, ha subrayado.

Dardo a Casado y Egea

Feijóo ha lanzado un recado a Pablo Casado y a Teodoro García Egea, arguyendo que el principal error de la anterior dirección nacional fue la “falta de unidad” y los constantes ataques a ciertos líderes autonómicos”.

Cuando no se preserva la unidad de un partido o se actúa de manera precipitada conlleva una serie de consecuencias

El gallego siente la “obligación moral e institucional” de reconducir la situación y recoser las profundas cicatrices. “Me pongo a disposición del partido por si consideran que soy la persona adecuada para iniciar un nuevo camino”, ha comentado el presidente de la Xunta en los primeros compases de su interlocución con Carlos Herrera.

Feijóo nunca ha escondido que daría este paso el día en el que las siglas del Partido Popular estuvieran en verdadero peligro. El escándalo del espionaje amenazó de muerte las aspiraciones electorales de una formación que había iniciado un descenso a los infiernos tras haber remontado el vuelo y adelantar al PSOE en las encuestas.

El diagnóstico que Feijóo hace del Partido Popular apunta en esta dirección, concretamente en la “falta de unidad” que ha imperado durante los años de regencia del tándem Casado-Egea. El precandidato ha afeado las maniobras entre bastidores de los fontaneros de la cúpula, en especial en lo referente a las decisiones adoptadas “contra algunos líderes autonómicos”. Lo ocurrido con la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz ayuso, fue, a su juicio, la gota que colmó el vaso.

"Cuando no se preserva la unidad de un partido o se actúa de manera precipitada conlleva una serie de consecuencias", ha deslizado el precandidato gallego al mismo tiempo que subrayaba que el partido “debe aceptar y no menoscabar”. “Se ha desencadenado una crisis, pero podemos zanjarla y mirar a futuro”, ha afirmado Feijóo.