El extesorero del PP Luis Bárcenas. EFE
Luis Bárcenas es una bomba de relojería para el Partido Popular. No hay partido en la oposición, ni siquiera el PSOE, que pueda hacer mayor daño a Génova que su exconsejero, al punto que el exsenador popular se ha convertido tras casi tres décadas en la formación en “el jefe de la oposición a un PP desconcertado”. Esa es la tesis que mantiene hoy el ex director de ABC y actualmente columnista de ese diario Ignacio Camacho. Coincide en parte, por cierto, con la opinión del exdirector de ELPLURAL.COM, Enric Sopena, quien en febrero señaló que “nuestra democracia depende en parte de dos personajes abyectos que, al parecer, tienen cogidos a Rajoy y a Juan Carlos de Borbón por sus respectivos testículos”. Se refería, claro, a Bárcenas y Urdangarin.
La gestión del asunto Bárcenas por la cúpula popular
En su artículo publicado este lunes en ABC, Ignacio Camacho critica la gestión que está haciendo la cúpula popular de la crisis en la que les ha metido el extesorero. “Si Rubalcaba pudiese teledirigir a su conveniencia la reacción del PP al escándalo de Bárcenas no lograría resultados más favorables que los que le están proporcionando a pachas entre Rajoy, Cospedal y esa vieja guardia tardoaznarista que no se sabe si trata de proteger al presidente, al extesorero o a sí misma”, afirma el columnista. "Entre el titubeo de las querellas, el sainete de los despidos 'simulados', el numerito de los registros y la guerrilla de los despachos, el partido del Gobierno se está saboteando a sí mismo con una incompetencia autodestructiva", añade.
Génova, llena de "cadáveres"
Camacho describe la sede del PP en la calle Génova como un “escenario de un vodevil de esos con cadáveres en armarios que se abren y se cierran; en cada portazo se oyen risas del respetable mientras los fantasmas se pasean entre los actores tropezando con los muebles del decorado”.
Rajoy no toma decisiones
Según el columnista de ABC, “nadie toma decisiones y menos que nadie el líder, que se ha enrocado en torno a su propio perfil estatuario. Toda la iniciativa está en manos de Bárcenas, que maneja los tiempos con muy mala leche”. Añade que el extesorero parece empeñado en vengarse de la secretaria General que lo sacó de su cargo y mientras tanto, el resto del partido, asiste silencioso y preocupado al espectáculo:
“Lo más grave es que ninguno de ellos , salvo quizá el silencioso presidente, sabe hasta dónde pueden llegar los daños. Todos se miran entre sí con recelo y procuran pasar inadvertidos para que no les roce la metralla de una bomba que intuyen a punto de explotar por algún lado”.
El PSOE, "autoneutralizado"
Finalmente concluye el exdirector de ABC que, "con el PSOE neutralizado por sus propios problemas y la calle ausente de un liderazgo que catalice sus protestas, Bárcenas se ha convertido en el auténtico jefe de la oposición, el único que de veras trae al PP de cabeza abajo”.
