Rodrigo Rato nadando en la piscina. Foto publicada por la SER en Twitter



Después de que el concejal del PP en el Ayuntamiento de Madrid Fernando Martínez Vidal acusara a la alcaldesa Manuela Carmena de tener una "doble moral" tras conocerse que en una situación de crisis económica haya pasado unas "vacaciones de lujo" en una villa próxima a Zahara de los Atunes (Cádiz), el periodista Javier Pérez de Albéniz ha cargado duramente en Cuarto Poder contra la doble moral del PP.

Las vacaciones de los dirigentes del PP
“Estaba la podemita en un yate como el de Rodrigo Rato? No. ¿En una pista de esquí veraniega como las que le gustan a Luis Bárcenas? Tampoco. ¿Quizá en Punta Cana, como José Manuel Soria y José Ignacio Wert, ministro y ex ministro, con todos los gastos pagados por un empresario hotelero? De ninguna manera. ¿En un spa portugués, como su antecesora Ana Botella durante el velatorio de las jóvenes muertas en el Madrid Arena? Frío, frío. La han pillado en un hotel de Zahara de los Atunes, Cádiz, con su familia”, escribe con sorna Albéniz.

600 euros
El periodista recuerda que Carmen se fue a Cádiz en el coche de su hija y volvió en tren. En el apartamento eran ocho personas, seis adultos, que asumieron de forma compartida el coste del alquiler, 3.800 euros. De este modo, la alcaldesa tuvo que pagar poco más de 600 euros.

El triple que Carmena
En este sentido, Albéniz explica que, en contra de lo afirmado por La Razón, la casa de descanso de Mariano Rajoy cuesta 1.800 euros a la semana, el triple de lo pagado por Carmena. Por ello, se muestra muy duro con Francisco Marhuenda.

Criticas a Marhuenda
“No es información, es propaganda. No es periodismo, es manipulación. Al día siguiente de publicar semejante bazofia en portada, Marhuenda, director del panfleto que se sigue editando desde 1998 pese a solo conocer pérdidas, era la estrella de la tertulia matinal de La Sexta. Lejos de repudiarle, las televisiones se lo rifan. Es el estado del periodismo, una profesión en descomposición ante la indiferencia de buena parte de los profesionales y las asociaciones de la prensa”, lamenta.