La reforma judicial del ministro Alberto Ruiz Gallardón nace con la férrea oposición de parte de la magistratura e incluso del Consejo General del Poder Judicial. Tres vocales del organismo que vela por el poder judicial, Margarita Robles, Félix Azón e Inmaculada Montalbán, emitieron a principios de mes un comunicado en el que definían la reforma como "un ataque sin precedentes" a la independencia judicial.

"Reforma desde el rodillo parlamentario"
Gallardón sacó adelante su reforma el pasado 20 de junio en el Congreso solo con 183 votos a favor del PP. En su escrito, los tres vocales del CGPJ advertían del "rodillo parlamentario" empleado para sacar adelante una ley que "deja reducida a la mínima expresión al referido órgano constitucional, por sentido de la responsabilidad y desde el compromiso con la ciudadanía", que les eligió "por medio de los representantes de la soberanía popular", se ven "en la obligación" de hacer pública su oposición.

"Ataque sin precedentes a la independencia" judicial
"La ley aprobada, que en la práctica desmantela el Consejo General del Poder Judicial, constituye un ataque sin precedentes en los tiempos de la democracia a la independencia del Poder Judicial, en cuanto ese órgano fue precisamente establecido en la Constitución, para garantizar y proteger la independencia de jueces/as y magistrados/as y la separación de poderes propia de un Estado de derecho", dice el escrito.

Para Robles, Azón y Montalbán, "la reforma aprobada, se ha hecho desde el rodillo parlamentario, aprovechando la mayoría absoluta del partido que sustenta el gobierno y sin el mínimo consenso parlamentario, imprescindible para abordar cualquier reforma, que incida o afecte al funcionamiento del Poder Judicial".

Coartar el trabajo de los jueces justo ahora
Y lanzaban una advertencia muy preocupante: "Resulta sorprendente que cuando los jueces están siendo la punta de lanza en la lucha contra la corrupción y en defensa de los derechos de los ciudadanos, desde el Ministerio de Justicia, se impulsen reformas que tienden a dificultar el trabajo de los jueces".

Preocupación por el silencio del propio CGPJ
Los tres vocales lamentaban asimismo que el CGPJ no alertara como organismo a la ciudadanía de "las peligrosas consecuencias que para la independencia judicial se derivan de la aprobación en solitario por el partido que sustenta al Gobierno" de esa reforma, "y más cuando el propio Consejo en su Informe advirtió de cuestiones incluidas en la reforma que podrían incurrir en clara inconstitucionalidad".