El Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) ha publicado los resultados del barómetro del mes de marzo, que ha nacido ya desactualizado. El trabajo de campo se llevó a cabo antes del terremoto - y sus consiguientes réplicas - de la moción fallida de censura en Murcia y, por tanto, de la salida de Pablo Iglesias del Gobierno para hacer frente a Isabel Díaz Ayuso en la Comunidad de Madrid. 

En este barómetro, el PSOE aumenta su ventaja con respecto a un PP que sigue en caída libre. Los de Pedro Sánchez aglutinarían el 31,3 por ciento de los votos si se celebrasen elecciones a día de hoy y dejaría a los conservadores a 13 puntos porcentuales. 

Pablo Casado y su séquito continúan en un salto al vacío que ya se hace habitual en detrimento de Vox, que crece y se pone a rebufo de los populares. La amenaza del sorpasso, aún lejana, ya sobrevolaría a un Partido Popular que caería hasta los 17,9 puntos

Los ultraderechistas de Santiago Abascal recogen las nueces del árbol conservador y las juntan hasta obtener el 15 por ciento de los sufragios. Una diferencia que aún es sustancial, pero que advierte con ser más escueta aún en venideros barómetros. 

La principal noticia de este desactualizado CIS es el hundimiento de Unidas Podemos. Antes de que su líder, Pablo Iglesias, anunciara su salida del Gobierno de la Nación para combatir a Ayuso en Madrid, los morados verían sus filas mermadas con un porcentaje de votos inferior a la barrera del 10 por ciento (9,6), donde han revoloteado hasta este momento,. 

Una décima por debajo de los morados estaría Ciudadanos, que se estabilizaría en torno a los 10 puntos porcentuales. Sin embargo, el barómetro se antoja ahora como una ucronía, a juzgar por los constantes cambios del tablero político.