El presidente del Partido Popular, Pablo Casado, ha convocado a todos los barones de su partido a una reunión este miércoles. La cita se producirá en uno de los momentos más crudos de la historia de la formación, con el partido dividido en dos y con su líder y su mano derecha agonizando lentamente.

Casado ha convocado a los barones territoriales, pero ha dejado fuera la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ya que no preside el PP autonómico. Fuentes de la dirección nacional han informado a EFE sobre esta cita, que se celebrará dos días después de que el jefe de los conservadores convocara a la Junta Directiva Nacional la próxima semana.

Forzado por su propia directiva, Casado se vio obligado a dar este paso previo a la convocatoria de un Congreso. Una mayoría de los dirigentes que conforman la cúpula del PP, a excepción de Pablo Montesinos, Antonio González Terol, Ana Beltrán y el propio García Egea, exigió al presidente del partido la celebración con carácter de urgencia de un congreso extraordinario. Incluso algunos de ellos amenazaron con dimitir si no se convocaba.

La Junta Directiva Nacional se convocó para el próximo lunes 28 de febrero en su concepción. Sin embargo, las airadas protestas de Juan Manuel Moreno Bonilla, presidente andaluz, por coincidir con el Día de Andalucía, motivaron el retraso del cónclave hasta el 1 de marzo.

Un clavo ardiendo

Casado cabalga malherido por una senda plagada de trampas, pero no se rinde y ahora busca el aplazamiento de la solución a la titánica crisis que vive el PP. Por el momento, resiste a las presiones de quienes le urgían a convocar un congreso extraordinario y a los simpatizantes agolpados a las puertas de Génova que pedían su cabeza.

La Junta Directiva Nacional la conforman más de 500 personas y son necesarios dos tercios de este órgano para forzar la convocatoria del congreso extraordinario. En el caso de que se supere la barrera, éste podría celebrarse pasados 45 o 30 días, ubicando el auto de fe a lo largo del mes de abril.

 Casado ha situado en el escalafón provincial del partido a personas afines a la dirección nacional. No obstante, su debilidad ha quedado al descubierto ante los pesos pesados de la formación popular. Tan sólo Fernando López Miras, presidente de la Región de Murcia, ha mantenido una postura próxima al tándem Casado-Egea.

Casado excluye a Ayuso

Hasta el próximo lunes, Casado ha de hacer frente a la primera de las pruebas y esta será ante sus barones, en el Comité Autonómico que ha citado para este miércoles. Al encuentro acudirán los presidentes de Galicia, Alberto Núñez Feijóo;  Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco;  Andalucía, Juanma Moreno y López Miras. Quien no asistirá será la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ya que no preside el PP en la región. 

En un principio, la cita se concibió en clave Comité Autonómico, órgano integrado por el propio presidente del partido, su secretario generalpresidentes autonómicos del partido y los presidentes de las comunidades gobernadas por el PP, según establecen los esatutos de la formación (Sección Tercera. Artículo 54.1). 

De hecho, fuentes de la dirección citadas por EFE y Europa Press daban a entender que la convocatoria se enmarcaba en una reunión del Comité Autonómico. Entendiéndose de esta forma, Isabel Díaz Ayuso estaría citada, ya que integra este órgano en calidad de presidenta autonómica. 

Sin embargo, fuentes de la dirección nacional han asegurado que al encuentro asistirán tan sólo los presidentes autonómicos del partido. "No se ha convocado al Comité Autonómico", aclaran desde Génova, al tiempo que argumentan que se habrá tratado de un malentendido. 

Por lo tanto, tal y como se ha confeccionado, la presidenta de la Comunidad de Madrid se queda fuera de una reunión a la que sí asistirá Pío García Escudero, como presidente de la gestora del PP de Madrid.