El líder de Más Madrid, Íñigo Errejón, ha insistido -una vez más- en que no baraja dar el salto a la política nacional a pesar de las continuas y persistentes voces que le sitúan en el ámbito estatal. “Ahora estoy en Más Madrid que, como su propio nombre indica, es para Madrid”, ha argumentado.

En declaraciones a El País, Errejón ha aseverado que “no me planteo dar el salto a la política nacional ni que haya elecciones”. Estas declaraciones las realizó cuando Partido Popular, Ciudadanos y Vox comunicaron verbalmente que ya había acuerdo para investir a Isabel Díaz Ayuso como presidenta para la Comunidad de Madrid.

Con respecto a la política nacional, Errejón se ha mojado y ha indicado que no cree que haya elecciones. “Tiene que haber un Gobierno progresista. Yo, donde he podido llevar la iniciativa, que es en la Comunidad de Madrid, he hecho lo que he podido, no porque me gustara pactar con Ciudadanos, sino porque creo que la alternativa, un gobierno del PP de la corrupción con Vox al lado, era peor y en política, a veces, hay que elegir el mal menor. Se nos dijo que no podíamos estar en el gobierno y dijimos, ‘pues no estamos’. Pediría lo mismo [a nivel nacional]. Quedan dos meses y nos jugamos que España pueda avanzar, tímidamente, porque con el PSOE siempre avanza tímidamente, pero que avance”, ha espetado.

Con respecto a la propuesta de Pedro Sánchez que fue rechazada por Pablo Iglesias, el líder de Más Madrid considera que “con lo que había [una vicepresidencia y tres ministerios] podía haber habido un gobierno el pasado jueves. Nada debería servir de excusa para que no haya un gobierno progresista. Podíamos tener un Gobierno ya. No entiendo por qué tenemos que esperar a septiembre. El contraste es terrible: las derechas en Madrid sí ponen de acuerdo y las fuerzas progresistas en España no”.

En este sentido, Errejón ha pedido que tanto PSOE como Podemos dejen “la pelea de ping-pong para ver quién tiene la culpa” y asuman “el mandato de los ciudadanos que votaron el pasado 28 de abril”: “Hay que ser fieles al mandato de los ciudadanos y pensar en el largo plazo, donde hay renuncias que valen la pena por el horizonte al que quieres llegar”; porque “si se instaura un clima de que todos son iguales, de decepción, ganará la derecha, que es quien mejor se mueve en el campo del cinismo. En una negociación todo el mundo estira, pero a veces, de tanto estirar, las cosas se rompen”.

Por otro lado, aqueja que Ciudadanos, “el partido que se supone que vino a la política para regenerarla” haya pactado con el PP, “de la corrupción de Gürtel, Púnica, de Lezo... que lleva un cuarto de siglo gobernando en Madrid” y que lo haga “asumiendo la agenda ideológica de Vox de recortar derechos y conquistas sociales”.