El presidente del Gobierno en funciones y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, propondrá a la Ejecutiva socialista a Meritxell Batet y a Manuel Cruz como presidentes del Congreso y del Senado respectivamente. Ambos del PSC y ambos nacidos en Cataluña. En el caso de Cruz, es el nombre propuesto por Sánchez después de que el bloque independentista bloqueara la designación de Miquel Iceta como senador. Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) votó en contra alegando motivos de forma, y según ha podido saber ElPlural.com, ni Batet ni Cruz han sido recibidos con entusiasmo.

Fuentes del partido insisten en que “querer nombrar a una presidenta catalana no es ninguna oferta de diálogo”. “Sánchez no ha llamado ni dialogado con el grupo parlamentario de ERC. Lo normal es llamar, sentarse en una mesa y decir que se quiere”, explican.

 Eso sí, las mismas fuentes matizan que “mejor Batet que Cruz”.

Una relación compleja

PSOE y ERC están condenados a entenderse. Ya no solo porque los republicanos catalanes son el primer partido en Cataluña y, en consecuencia, uno de los interlocutores preferentes; sino que también serán uno de sus socios prioritarios (para empezar, Sánchez necesitará sus votos para ser investido presidente). Pero los puentes comunicativos entre los socialistas y Esquerra tiempo ha que se dinamitaron y requieren de una reconstrucción.

ERC tumbó los Presupuestos de Sánchez y abocó a la convocatoria de elecciones anticipadas. Desde entonces, los contactos se han limitado a la noche electoral, con el habitual intercambio de mensajes, ya contactos entre Gabriel Rufián y Adriana Lastra por un lado y Pere Aragonès y Carmen Calvo por otro.

Y es que, los republicanos están molestos con Sánchez porque no les llama. Desde ERC explican a ElPlural.com que el enfado con el PSOE por no buscar el consenso antes de hacer los anuncios viene de lejos: “Ya en la anterior legislatura, cuando había reales decretos, nunca, nunca, nunca se negoció nada. Y era como que Esquerra tenía que votar todo. El hastío viene de ahí”.

“Contaban con ERC sin mediar palabra, sin ningún contacto y dando por sentado nuestro apoyo. Esto cansó. Y con Iceta más de lo mismo”, denuncian.

En declaraciones a este diario, el diputado de ERC Joan Margall ya criticó el pasado enero que, a pesar de que puedan compartir el contenido de muchos reales decretos del PSOE, no apoyarían su convalidación porque porque “nos mosquea la manera en cómo se tratan los reales decretos. Porque se aprueba [en Consejo de Ministros] sin que se nos diga absolutamente nada y luego vienen a buscar el voto a favor”.

Pura estrategia electoral

Fuentes de ERC consideran que “el PSOE todavía tiene miedo escénico, cobardía o prudencia extrema de no mostrar públicamente ninguna aproximación a ERC por lo que pueda resultar electoralmente. Todavía estamos en campaña y yo creo que están en la estrategia de marcar distancias. Ya luego nos buscará, pero la estrategia es demostrar que ERC no cuenta para ellos”.

“Antes de las elecciones municipales no va a haber ni un solo acercamiento con ERC por si acaso. Lo que es obvio es que estamos en un escenario en que el PSOE nos tiene un poco de alergia. Estamos pendientes de que pasen cosas”, añaden.

No se negoció la composición de la Mesa

A pesar de que se ha publicado que los socialistas valorarían entregar un puesto a Esquerra Republicana de Catalunya (en detrimento de Podemos), fuentes internas aseguran a ElPlural.com que no se ha producido ninguna negociación al respecto.

“Es un rumor. Nosotros no hemos pedido nada, pero sí que ha corrido esta hipótesis. Se ha publicado, lo hemos leído, pero a nosotros no nos ha llegado nada. No ha habido nada ni mucho menos”, dicen a este periódico.

De hecho, subrayan que “la noche electoral hubo contactos”, como es habitual, pero desde entonces “interlocución ninguna”. “Estamos en stand by todos, a ver qué pasa el 26M”, sentencia.