Termina un mitin marcado por una plaza de toros muy llena, gente a las afueras y mensajes de odio a Iglesias, Sánchez y los menas.
Puedes leer la crónica de la jornada en el siguiente enlace: Vox hace una demostración de fuerza tras romper la campaña electoral
Abascal da paso al himno nacional para cerra el acto, según sus palabras, "como Dios manda". La gente, en pie y dando "vivas" a España.
"Si hay una mayoría alternativa, aunque sea con un mal resultado para Vox, será un buen resultado", dice Abascal.
"El deber de los españoles es, en primer lugar, servir a los españoles. Estamos en España y tenemos un deber con nuestros compatriotas. Al resto los ayudaremos en su tierra, en su pueblo, en su país, para que no vengan aquí a crear inseguridad", dice Abascal.
Como hiciera su predecesora en el turno de la palabra, Santiago Abascal ha mencionado el Falcon de Sánchez y el chalé de Galapagar de Iglesias para tratar de desmontar los argumentos de la izquierda. "Que se vaya a Venezuela", ha gritado una asistente. "Eso digo yo", ha contestado Abascal.
"Vox ha condenado, condena y condenará siempre la violencia", ha dicho Abascal, diciendo poco después que Vox se presentará como acusación popular para ver si estas amenazas son reales o ficticias.
"Tenemos que ganarnos el pan, seguir trabajando, que las empresas no quiebren, conservar los empleos. Tenemos que encarar la crisis económica y social, y con ellos no lo haremos porque solo buscan su bienestar. Por eso tiene que llegar Vox, para decir verdades como puños", dice Monasterio.
"Atacan la educación de nuestros hijos, los valores de la libertad. Queremos empleos dignos. Nos engañaron y yo no me creo nada de este Gobierno", insiste Monasterio, en referencia de nuevo a las balas recibidas por Pablo Iglesias. "Cuando les cuestionamos que hay que bajar a la mitad el número de diputados, no nos dejan hablar", prosigue, diciendo que "todos miran para otro lado y sacan otro tema porque están a su bienestar y no en el de todos los ciudadanos".
"Muchas madres nos cuentan que tienen miedo a que sus hijas salgan a la calle porque los menas las acosan", dice Monasterio, que insiste en la criminalización de los menas. "Esto no lo condena Pablo Iglesias. Todos están sometidos a las ideas de la izquierda, hasta que llegó Vox, que les dice las verdades a la cara aunque nos lancen piedras".
Rocío Monasterio arranca el acto arremetiendo contra la "prensa progre" que Vox está teniendo que aguantar en esta campaña. Por supuesto, como ya hiciera este viernes en Parla Santiago Abascal, recuerda que Àngels Barceló cogió de la manita a Pablo Iglesias para que no se fuera del debate de Cadena Ser que ella hizo saltar por los aires al negarse a condenar las amenazas de muerte recibidas por Iglesias.
