Una plaza de toros en la que se respetaba el aforo por los pelos. Banderas de España, carteles del sindicato Solidaridad y un ambiente festivo que ha ido in crescendo desde que tomara la palabra la candidata a las elecciones del 4 de mayo, Rocío Monasterio, quien ha hecho que los aplausos fueran atronadores en un acto donde se ha presentado como la única alternativa real a “los corderitos y los acobardados”.

Fiel a su estilo, la dirigente ultra ha empezado arremetiendo contra Pablo Iglesias, los medios progres y Àngels Barceló, a quien ha acusado de no ser una periodista independiente y “coger la manita a Pablo Iglesias” cuando abandonó el debate de Cadena Ser después de que ella decidiese no condenar las amenazas de muerte recibidas por el otrora vicepresidente del Gobierno.

Pero Monasterio no se ha quedado ahí. “Molestamos mucho por hablamos de la seguridad en los barrios, acabando con las mafias de okupación y diciendo que a los que okupan hay que sacarlos de una patada a las 24 horas”, ha indicado. También ha habido momentos para tensionar el ambiente atacando a los menores extranjeros no acompañados: “Muchas madres nos cuentan que tienen miedo a que sus hijas salgan a la calle porque los menas las acosan”.

“Están alejados del mundo real, en su burbuja del chalé de Galapagar poniendo nuevas restricciones. Hay que levantar todas las restricciones, levantar el toque de queda y dejar a la gente trabajar”, ha indicado Monasterio, que se ha mostrado dispuesta a que a vida vuelva a su normalidad, con mascarilla y distancia de seguridad, para que la gente pueda abrir sus negocios y alejar la quiebra: “Los madrileños tenemos que volver a casa como si fuéramos delincuentes, no vaya a ser que nos pongan una multa a las once y pico. Tenemos que ganarnos el pan, seguir trabajando, que las empresas no quiebren, conservar los empleos. Tenemos que encarar la crisis económica y social, y con ellos no lo haremos porque solo buscan su bienestar. Por eso tiene que llegar Vox, para decir verdades como puños”, ha indicado.

Gritos de “rata” a Iglesias durante el turno de Abascal

El presidente de la formación, Santiago Abascal, ha tomado poco después la palabra, presentado por su predecesora en el atril como “un hombre valiente que no se ha rendido nunca”. Abascal ha aprovechado para decir que “Vox condenó, condena y condenará siempre toda la violencia”. Además, ha indicado que su formación se personará como acusación popular en la investigación a las amenazas de muerte recibidas por Iglesias para dilucidar si fueron reales o ficticias.

Durante su turno de palabra, el presidente de Vox ha sido interrumpido en alguna ocasión por varios asistentes que, sin dudarlo, cada vez que Iglesias era mencionado gritaban “rata”, "perro", "chepudo" y toda suerte de exabruptos. Un acto que no es casual, ya que este mismo viernes en Parla Abascal justificó estos insultos, diciendo que el candidato de Unidas Podemos tiene “la piel muy fina y la lengua muy larga”.