Edmundo Rodríguez Sobrino, mano derecha de Ignacio González en el Canal de Isabel II y el presunto responsable de inflar la compra de la brasileña Emissao cambio de una importante comisión reconoció el pasado mes de julio ante el juez de la Audiencia Nacional Manuel García Castellón que las mordidas se ingresaron en Suiza. La declaración, a la que ha tenido acceso el diario El Mundo, la prestó de forma voluntaria. La empresa brasileña se compró por 20 millones de euros y un año después su valor contable era de apenas cinco.
Según este periódico, Rodríguez Sobrino ha presentado documentación ante el instructor de la causa de cómo se puso a disposición de Ignacio González su parte en una cuenta en Suiza aunque matizó que esa parte permaneció a "su disposición", pero que nunca hizo uso del dinero.
Trato favorable para él y para su hija
Rodríguez Sobrino, actualmente en prisión, sólo reconoció su participación en la operación en Brasil. Con su autoinculpación intenta conseguir un trato favorable que se extienda a su hija, Patricia Ana Rodríguez, también investigada en el marco del caso Lezo como su presunta testaferro. La situación de la hija se complicó cuando, durante un registro policial en un apartamento suyo en Barranquilla (Colombia), se encontraron 262.000 euros de su padre.
A Barranquilla era a donde Rodríguez Sobrino, también exconsejero de La Razón, acudía con frecuencia por su actividad profesional en Inassa, la filial latinoamericana del Canal de Isabel II de la que el hombre fuerte de González fue presidente hasta su cese hace poco más de un año.
Abre las declaraciones de septiembre
Precisamente este miércoles, Patricia Ana declara ante el juez de la Audiencia Nacional Manuel García Castellón como imputada. Se ha adelantado su comparecencia, que inicialmente estaba prevista para el próximo 22 de septiembre. Será la primera de las 51 que están previstas para el mes de septiembre y octubre, entre ellas la del expresidente de OHL Juan Miguel Villar Mir el próximo 12 de septiembre o la del exgerente del PP de Madrid Beltrán Gutiérrez el día 29 del mismo mes.
Un "extenso patrimonio" bajo sospecha
Según la investigación, se ha determinado "la existencia de un extenso patrimonio" a nombre de Rodríguez Sobrino o al de su hija, tanto dentro como fuera de España (Reino Unido, República Dominicana y Colombia) y que supuestamente fue adquirido con los beneficios "de aquellos anómalos negocios". Negocios como la compra de la brasileña Emissao, que se efectuó sobrevalorando su precio "con el fin de desviar a fines privados los fondos públicos utilizados en un adquisición" por 20 millones de dólares.
Además de la vivienda de Barranquilla, declaró otra en Puerto Plata (República Dominicana), que fue adquirida en fechas "muy próximas" a la compra de la sociedad brasileña Emissao por parte de Inassa, una operación que se investiga por un posible sobreprecio. Finalmente, declaró una tercera vivienda en Londres (Inglaterra) y varias cuentas corrientes en el Reino Unido y en la Isla de Jersey.
La investigada está citada a declarar como investigada en relación a la pieza 5 del caso, en la que el juez investiga un posible blanqueo de capitales en el que pudieron incurrir los investigados a través de sus operaciones comerciales.
Actualmente, Rodríguez Sobrino e Ignacio González son los únicos investigados en el caso Lezo que continúan en prisión desde que entraron el pasado 21 de abril.
