El alcalde de Argentona (Barcelona), Eudald Calvo, que militó en la CUP hasta el año pasado, ha dimitido tras reconocer que que abusó sexualmente hasta tres veces de una joven que era entonces amiga de su pareja sentimental y que lo había denunciado en Twitter a través de una cuenta anónima.

La coalición Unitat-Argentona, integrada por la asamblea local de la CUP, ERC, Argentona en Comú y los CDR, informa en un comunicado que Calvo explicó a la asamblea, amtenida en la noche del martes, su versión de lo sucedido, reconoció “los hechos machistas de los que se le acusaba” y pidió disculpas públicamente, aunque, según él, algunos medios habrían tergiversado lo ocurrido.

La coalición advierte, por otra parte, que “emprenderá las acciones legales pertinentes contra las difamaciones que se han producido o se puedan producir al respecto”. La dirección de la CUP expulsó a Calvo del partido en diciembre tras investigarle por las agresiones machistas. La víctima que denunció los hechos a través de Twitter aseguró anoche que es la primera vez que lo denunciaba y que ocurrió hace 10 años, por lo que puede deducirse que el caso que forzó la dimisión es distinto.

El relato de la víctima en Twitter

Las disculpas del alcalde, publicadas en Twitter, llegaron después de que la víctima de los abusos sexuales desvelara los hechos desde la cuenta "Sabesquiensoy", donde relató que Eudald Calvo la manoseó y le tocó los pechos en varias ocasiones y luego se rió de ella y volvió a hacerlo. La primera agresión ocurrió en una manifestación, en la que el alcalde cupero le pegó un adhesivo en los pechos y se los "apretó" sin pedir permiso. "Yo estaba tan perpleja que tardé unos segundos en reaccionar, durante los cuales me sonrió lascivamente". Luego, el regidor se marchó "rápidamente sin dejar de reír", según contó la víctima. 

La segunda agresión fue en fin de año, cuando el político y exvicepresidente segundo de la Asociación de Municipios por la Independencia (AMI) se acercó a la mujer y la metió la mano por debajo de la camiseta y del sujetador. "Me deshice como pude y lo miré con cara de odio. Otra vez, se rió y no dijo nada", denunció la víctima

El tercer abuso se produjo en una piscina a la que acudieron Calvo y la víctima con otras personas y el alcalde intentó acercársele en diversas ocasiones mientras ella lo "evitaba", hasta que consiguió deshacerle el nudo del bikini aprovechando una distracción de ella.

Pasado un tiempo, la mujer se quejó al alcalde por sus actos, pero él se rió de ella, según el relato de la víctima.

La respuesta pública del político fue ésta: "El lunes aparecieron en las redes sociales algunas acusaciones contra mí por haber tenido actitudes machistas y sexistas hace unos años. Actitudes que no justificaré ni discutiré porque no creo que ahora sea lo más relevante, no me perderé en los detalles. Esto quiere ser una disculpa".