“A Dolores no la quieren en el PP”, asegura en declaraciones a ELPLURAL.COM fuentes próximas al miembro de la Ejecutiva Regional del partido en Castilla-La Mancha, Rogelio Pardo, que ha presentado hace unas horas su dimisión por considerar que el viernes hubo un "auténtico pucherazo" en el recuento de votos de la enmienda que hablaba explícitamente del caso de la secretaria general, María Dolores de Cospedal, que pedía limitar la acumulación de cargos (secretaria general, presidenta del PP castellano-manchego, diputada nacional por Toledo y ministra de Defensa) y que fue rechazada por sólo 25 votos de diferencia (303 votos a favor y 328 en contra), no sin antes contar hasta en dos ocasiones las papeletas y hacerlo de forma como “si se tratara de un congreso a la venezolana, propio de una república bananera”, comentan las mismas fuentes.

“Pucherazo y fraude”

Rogelio Pardo ha enviado un correo electrónico al secretario general del PP de Castilla-La Mancha, Vicente Tirado, anunciado su dimisión irrevocable porque a su entender hubo un “auténtico pucherazo” en el recuento de votos, al mismo tiempo que  justifica su decisión al considerar “un fraude democrático”, por parte del aparato del Partido Popular, lo ocurrido a las 20:21 horas en la Caja Mágica de Madrid cuando se procedió al  recuento de los votos de la enmienda de incompatibilidades presentada por el compromisario de la localidad conquense de San Clemente, Francisco Risueño, criticado y vilipendiado por la dirección del PP conquense, como recogió hacer unos días ELPLURAL.COM.

“Maquillar los resultados”

La dimisión de Rogelio Pardo es un duro golpe para Cospedal ya que se trata de un peso pesado de la política castellano-manchega, otrora mano derecha de la ministra de Defensa, como lo prueba que haya sido de todo y haya ocupado importantes cargos de responsabilidad bajo el mandato de la secretaria general del PP, como senador, diputado regional, portavoz del Grupo Popular en la Diputación de Cuenca, delegado de la Junta en esta provincia y mítico alcalde de la localidad de Minglanilla, además de miembro de todas las ejecutivas de la formación conservadora desde hace años.

De ahí que su dimisión y denuncia de “pucherazo” haya caído como un bomba en la sesión congresual de la mañana del sábado, donde los compromisarios no hablaban de otra cosa que del contenido del email enviado por Pardo, que además de lo referido también señala: “Creo firmemente que los afiliados y el Partido Popular se merecen tener unos dirigentes que respeten la soberanía y la voluntad de las bases y considero que maquillar los resultados atenta contra los pilares fundacionales de nuestro partido”, añade, “por todos estos motivos presento oficialmente mi dimisión como miembro del Comité Ejecutivo Regional de Partido Popular de Castilla-La Mancha”.

Anuncio de nuevas dimisiones

ELPLURAL.COM venía publicando desde hace algunos meses la crisis por la que atravesaba el PP en Castilla-La Mancha después de que María Dolores de Cospedal abandonara la región, trasladara su domicilio a Madrid y aceptara la cartera de Defensa. “Aunque en realidad, el descontento viene desde el primer momento de perder el Gobierno regional y la dimisión de Dolores de las Cortes regionales para ocupar un escaño en el Congreso de los Diputados”, puntualizan nuestros interlocutores. 

Meses después, el descontento silencioso es ya un clamor y a la dimisión de Rogelio Pardo hay que sumar también la anunciada por Pedro García Hidalgo, actual teniente de alcalde y concejal de Servicios a la Ciudad y Festejos del Ayuntamiento de Cuenca, que ha elogiado la decisión de Pardo, considerándola “coherente y valiente”, a la vez que anunciaba su dimisión como miembro del Comité Ejecutivo de Castilla-La Mancha porque “que una votación importante se resuelva contando los votos a ojo de la mesa en un auditorio enorme no me parece lo más democrático”, dice.