La supuesta “mordida” de los 200.000 euros que el extesorero del PP entregó al gerente de María Dolores Cospedal en Castilla-La Mancha, José Ángel Cañas (), a cambio de conceder supuestamente a Sacyr la recogida de basuras de Toledo, según declaraciones de Luis Bárcenas en sede judicial, seguirá en paradero desconocido y sin estar registrada en documento oficial contable alguno en ninguna sede popular, ya que la presidenta castellano-manchega y secretaria general del PP, que sí reconoce la “entrega legal” de esa cantidad, se niega a comparecer en las Cortes regionales para dar explicaciones sobre este asunto, que, sin embargo, la puede llevar ante el juez de Audiencia Nacional, Pablo Ruz, que atendiendo a la Fiscalía podría llamarla a declarar, e incluso a protagonizar un careo judicial con Bárcenas, como el preso más famoso de Soto del Real ha pedido ya al titular del Juzgado de Instrucción número 5 ante el desmentido de la número dos de Mariano Rajoy, quien hará todo lo contrario de su otrora mano derecha y sí comparecerá el 1 de agosto en el Congreso de los Diputados, aunque, eso sí, tras ser llevado “a rastras” por la presión política y mediática.

“Quien algo teme, algo debe”
Presión mediática que en Castilla-La Mancha no existe, ya que el 90 por ciento de los medios de comunicación se encuentran en la órbita del PP y bajo estricto control de María Dolores Cospedal. No así la presión política, que en palabras de la secretaria segunda de la Mesa de las Cortes de Castilla-La Mancha, la socialista Blanca Fernández, exige de nuevo la comparecencia de la presidenta “para que explique dónde están los 200.000 euros que ella reconoce que cobró el PP regional y que no aparecen”, añade, “si el dinero es limpio, debe estar en la contabilidad limpia del PP; lo que no nos valen son las contradicciones y la ausencia de explicaciones en las que han incurrido Cospedal y el PP hasta ahora”. Por todo ello la portavoz del PSOE lo tiene claro: “Si Cospedal no viene a las Cortes, funcionará el refranero que dice que quien calla, otorga, y que quien algo teme, algo debe”.

Entre “el esperpento y el ridículo”
Es más, la diputada socialista asegura que ”rozaría el esperpento y el ridículo que Cospedal se niegue a venir a las Cortes de Castilla-La Mancha a hablar de este asunto, y luego tengamos que ver que lo debe hacer en la Audiencia Nacional, en un careo judicial con Luis Bárcenas”. En este sentido, hay que recordar que la secretaria general está dispuesta a declarar ante Ruz, aunque se extraña que la Fiscalía solo haya pedido su comparecencia y no la del resto de sus antecesores en el cargo.

“Cospedal ya ha comparecido”
Ridículo que el Grupo Popular está cansado de protagonizar, según declaraciones de un diputado del PP a ELPLURAL.COM. “Primero nos negamos a que Cospedal compareciera en sede parlamentaria aludiendo defectos de forma, más tarde dijimos que la petición era una ilegalidad, y hoy nos negamos porque decimos que la presidenta ya ha dado explicaciones, ¿cuándo? ¿dónde?” El caso es que la Mesa con mayoría del PP ha vuelto a rechazar la comparecencia de la lideresa porque entiende que “ya ha dado las explicaciones necesarias en las Cortes, además de tratarse de un asunto que no se encuentra en la acción del Gobierno”.

Desprestigiar al adversario
Una mayoría política de apenas un diputado que el PP intenta utilizar para desprestigiar al adversario, concretamente al vicepresidente segundo de las Cortes de Castilla-La Mancha y secretario de Organización del PSOE, Jesús Fernández Vaquero, a quien la derecha manchega acusa de intentar “boicotear” el pleno del “pucherazo electoral” (reducción de los diputados a la mitad para que a Cospedal le sea más fácil ganar las elecciones). “Es un hecho sin precedentes, y por lo tanto debe tener una sanción sin precedentes”, ha reconocido el portavoz popular, Francisco Cañizares. Las mismas fuentes del PP no creen que Cospedal se atreva a “matar al mensajero, sería un escándalo de dimensiones incalculables y de repercusiones sociales irreversibles”, dice. Hay que recordar que el ahora presidente de las Cortes y señalado por Bárcenas en la supuesta “mordida” de los 200.000 euros, Vicente Tirado, llamó al entonces presidente de la Cámara regional, el socialista Francisco Pardo, “sinvergüenza” y otros improperios…y salvo las consabidas críticas no pasó nada.