La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha protagonizado este miércoles la portada de la revista Lectura tras haber sido pillada paseando sin mascarilla por las calles de Ibiza junto a su pareja.

Además, tal y como ha señalado La Otra Crónica, el nuevo amor de la líder popular es un técnico sanitario y tiene 45 años. La noticia ha llamado la atención ya que la propia Ayuso ha reiterado en varias ocasiones que no tenía pareja. De hecho, El pasado mes de noviembre, puso fin a una relación de casi cinco años de relación con el peluquero y estilista Jairo Alonso.

Pero más allá del mero hecho de que la presidenta de la Comunidad de Madrid tenga novio, destaca que una representante pública de su calado no respete una norma básica de salud y respeto como es utilizar la mascarilla. Una norma obligatoria en todo el territorio y nacional y por supuesto en Ibiza. De hecho, el no utilizar mascarilla en un espacio público acarrea multas de hasta 100 euros.

Según el Boletín Oficial de las Islas Baleares "el incumplimiento de la obligación de uso de mascarillas debe considerarse infracción leve a efectos de lo previsto en el artículo 57 de la mencionada Ley 33/2011, y sancionado con multa de hasta cien euros y que el incumplimiento de las medidas previstas en los artículos 17.2 y 18.1, cuando constituyan infracciones administrativas en el ámbito del transporte, debe ser sancionado de conformidad con lo dispuesto en las leyes sectoriales correspondientes".

Asimismo, se añade que "se considera una necesidad extraordinaria y urgente establecer medidas que permitan a la Administración de la Comunidad Autónoma las Illes Balears afrontar con celeridad y eficacia la tramitación y resolución de los procedimientos sancionadores que se incoen por incumplimientos de las disposiciones vigentes dictadas para paliar los efectos de la crisis ocasionada por la COVID-19".

A pesar de la claridad con la que se tipifica qué supone el incumplimiento de las normas, el Govern balear solo ha cobrado 914 sanciones de las 20.398 denuncias interpuestas, lo que supone un 4,4% del total. Por tanto, son escasas las posibilidades de que Ayuso sea finalmente multada por su insensatez y falta de civismo.