Queda inaugurado el curso político ante la sociedad civil. Lo abrió este martes, de acuerdo con sus palabras, Ana Pastorpresidenta del Congreso de los Diputados, con su intervención en el primer desayuno de septiembre de Nueva Economía Fórum. Fue presentada por Pablo Casado, presidente de su partido, el PP, quien no se paró en los pasillos del hotel madrileño donde se celebraba  a responder a preguntas de la prensa sobre la actualidad.

"Superstición del populismo"

En la sala, en lugares preferentes, se encontraban Dolors MontserratMaría Dolores de Cospedal y Javier Maroto, entre otros. Casado habló de supersticiones. De la "superstición del populismo", afirmó que intenta aplicar recetas fracasadas para problemas inexistentes. Lamentó que haya "falta de claridad" en las políticas y concluyó que la subida del paro registrada el pasado mes de agosto es resultado de la aplicación de "recetas fracasadas". Cada verano, cuando agosto llega a su fin, el empleo suele resentirse; aunque ésta ha sido la mayor subida en ese mes desde 2011.

"El dique del PP"

También citó la "superstición del nacionalismo", que se traduce, declaró, en un "chantaje" al Gobierno. Su partido "no va a tolerar" una autoconsulta o referéndum. Subrayó que "la única pretensión es una consulta por la autodeterminación". "Ayer ya avisamos, y hoy volvemos a reivindicar, que cualquier pretensión de ruptura con nuestra historia tendrá el dique del PP. Si se consuma esa amenaza de consulta radical, nosotros estaremos enfrente", advirtió. Añadió que no hay ningún estatuto que votar, porque el que hay ya se votó. "Menos mal que el PP lo recurrió, ya que ese estatuto ilegal fue puesto en duda por el Constitucional y fue modificado. No podemos tolerar que ahora se presente esa resolución como un engaño", manifestó.

 

Lealtad a Casado y defensa de Rajoy

Lo primero que hizo Pastor fue demostrar su lealtad al nuevo líder del PP. A su vez, defendió el legado de Mariano Rajoy. "Contábamos con un Gobierno responsable, comprometido y con una agenda. Ello nos condujo a unos resultados que se han podido constatar dentro y fuera de España. La recuperación económica era una realidad que se podía ver en la calle", reflexionó. A su entender, 2017 fue el año del que "fuimos objeto del mayor ataque que se ha lanzado contra la unidad de España". Sí bien, había estabilidad "para hacer frente al desafío secesionista". Según su relato, "otros intereses acabaron imponiéndose en junio de este año", en alusión a la llegada de Pedro Sánchez a La Moncloa. El mecanismo de la moción de censura "no se dirige a crear gobiernos frágiles" sino a crear "consensos". Pastor sostuvo que "parece que las cosas no van por la senda de la estabilidad" y que, "a las primeras de cambio, le han dado la espalda los mismos que le dieron el apoyo". Por eso, "los españoles tienen motivos de inquietudes por las exigencias de estos grupos políticos". Sentenció que "los españoles no necesitan aliados que preconicen un nacionalismo excluyente" y que "los españoles necesitan aliados que defiendan la unidad de España".

"No se pueden coger atajos"

Después, Pastor recordó que las instituciones han de funcionar en el marco de la Constitución y que hay que respetar "el sistema de contrapesos" entre las diversas instituciones. "No se pueden coger atajos para sortear los mecanismos de las instituciones. No hagamos juegos de artificios", expresó rechazando, sin mencionarlo expresamente, el que el Gobierno y sus socios intenten retirar el veto del Senado en el techo de gasto.

"Señorías y señoríos"

Sobre la  defensa de la igualdad de la mujer, Pastor indicó que "hay que trabajar y seguir trabajando" por ella. "Me duele cuando escucho que los partidos nos echamos la culpa los unos a los otros de la violencia de género. El compromiso ha de ser auténtico. No estamos dispuestas a, ni en las instituciones ni en ámbitos de la sociedad, a ser una mera comparsa. Las mujeres tenemos que dar ejemplo de unidad en algo tan importante como la violencia contra las mujeres", acentuó. En el turno de preguntas, le cuestionaron por la opción de cambiar a "Congreso de Diputados y Diputadas" y respondió que ella es cada día más feminista, pero que entonces tendría que decir "señorías y señoríos". Alegó que "aquí la guerra no está en el lenguaje", a pesar de que hay que cuidarlo, y que, "tonterías, las justas".

A por un "diálogo constructivo"

Con la clara intención de dar un titular, Pastor invitó a Quim Torra, president de la Generalitat, a la Cámara Baja a "defender" sus ideas. "Cuando se habla de diálogo, el diálogo es muy necesario", certificó. Reclamó un "diálogo constructivo", en el que Torra también escuche los planteamientos de los demás partidos políticos para que "dentro de la ley" se pueda avanzar y llegar a soluciones. Insistió que los cambios hay que hacerlos "todos" dentro de la ley y que hay que hablar en las instituciones. Del tema de la polémica por los lazos amarillos, argumentó que debe evitarse la utilización de espacios púbicos en el interés de posiciones ideológicas. "Yo en la mesa del Congreso no puedo ponerme un símbolo del PP. Puedo ir a un acto de mi partido. Pero, lo otro nadie lo entendería. Tampoco porque alguien se ponga una prenda amarilla se puede criticar. Este tipo de cosas lo que hacen es dividir a los ciudadanos", pidió de esta manera respeto y equilibrio.

Valle de los Caídos

Una de las preguntas que le hicieron a Pastor fue si ha mediado entre el Gobierno y la familia Franco por el traslado de sus restos del Valle de los Caídos, un tema que la presidenta del Congreso obvió en un discurso anterior. Negó que, ella que media "ante muchas cosas", le hayan pedido mediar con la familia Franco. Y finiquitó el asunto: "Yo no estoy con los dictadores". El PP votará abstención en la exhumación de Franco. Monsterrat, portavoz del PP en el Congreso, a la salida del desayuno, puso "un 10" a lo dicho por Pastor.