“Boicot a Marruecos”, claman las redes de la ultraderecha en las últimas horas después de que el reino alauí haya mostrado pasividad, cuando no complicidad, en la llegada de miles de inmigrantes en pocas horas a Ceuta. Junto al mensaje, siempre la misma imagen: un código de barras como ejemplo de qué hay que revisar en los productos del supermercado para afectar a la economía marroquí. Lo llamativo es que la campaña, difundida en cuentas de ultraderecha y cercanas a Vox, recicla una campaña de apoyo ya antigua que pedía apoyar al pueblo saharaui y con más reminiscencia en la izquierda.

Los productos que España importa de Marruecos suelen tener carácter alimenticio como productos para latas de conserva, pulpo, hortalizas, aceite de oliva, dátiles. También productos de cuero y textiles, como señala El Confidencial Digital.

El mensaje con el que la campaña se esta difundiendo también apela al proteccionismo de los agricultores españoles: “Boicot a los productos de Marruecos, apoya a nuestros agricultores y ganaderos, consume sólo productos españoles”. Junto al mensaje, un código de barras que apunta a fijarse en el inicio para buscar las cifras 611 que apuntan al origen marroquí.

Lo curioso es que esta campaña no es nueva y es reciclada, pero su origen está en defensa del Sáhara Occidental frente a la política invasiva de Marruecos. Sin embargo, ahora ha dado un giro de 180 grados y son movimientos de ultraderecha y cercanos a Vox quienes lo están difundiendo en redes sociales con el objetivo de castigar a Marruecos por la llegada masiva de inmigrantes a Ceuta, aunque sin ninguna connotación de apoyo al pueblo saharaui.

La campaña también ha sido difundida en foros como Burbuja.info, habitual punto de encuentro de teorías y campañas de la derecha radical. Allí se difunde el mismo mensaje pero se profundiza: "Como está claro que el gobierno va a hacer entre poco y nada con la invasión que estamos sufriendo en Ceuta y cuyo origen es Marruecos, debemos ser los ciudadanos de a pie los que tomemos medidas contundentes contra ese país y, sobre todo, contra su miserable gobierno y jefe de estado". Y añaden que "ya que el gobierno les regala nuestro dinero para hacer más grande su ejército y su policía, no seamos nosotros también imbéciles, ni un duro para los productos marroquíes".