Compartir piso durante la juventud es una experiencia única en la que se teje una enorme maraña de vivencias compartidas, risas, desafíos y amistades que perduran en el tiempo. Este capítulo de la vida se caracteriza por la exploración de la independencia, la gestión del presupuesto y la construcción de relaciones interpersonales.
Desde las negociaciones sobre tareas domésticas hasta las cenas improvisadas, el compartir espacio con compañeros de piso brinda oportunidades para aprender sobre la convivencia, la tolerancia y la solidaridad. Este periodo no solo implica la coexistencia en un mismo techo, sino también la creación de vínculos que se transforman en anécdotas inolvidables, contribuyendo de manera significativa al crecimiento personal y a la formación de recuerdos inolvidables.
Unos recuerdos que son aún más inolvidables cuando tu compañero de piso es una de las grandes estrellas de Hollywood, claro está. Por este motivo no es de extrañar que en una entrevista en el programa norteamericano “Live with Kelly and Mark” hayan querido preguntar a Jason Priestley, la estrella de “Sensación de vivir”, por este periodo en el que compartió un piso de dos habitaciones para tres personas con el ex de Angelina Jolie.
Ante la pregunta cómplice de los presentadores, lo primero que quiso aclarar Priestley “no era tan horrible como su otro compañero de piso, que era un absoluto desastre”. Pero es que además quiso contar una costumbre que ambos tenían y que ha dejado sorprendida a la audiencia, una competición por ver quién aguantaba más tiempo sin ducharse. “Siempre ganada Brad”, añadió el intérprete, que además agregó que dudaba que Pitt en la actualidad siguiera manteniendo esta idea.
Además, añadió que en aquella época lo que solían tener en la nevera era cerveza, algo que por otro lado también suele ser habitual en los pisos de estudiantes. Sin duda, una prueba más de que las estrellas de Hollywood son personas normales y corrientes y han tenido vidas mundanas como cualquiera de nosotros.
En todo caso, la convivencia entre ambos tocó a su fin poco tiempo después y ambos emprendieron caminos separados. El éxito le llegó a Pitt con su aparición en la película “Thelma y Louise” de Ridley Scott (1991) mientras que Priestly saboreó las mieles del éxito un poco antes, cuando fue escogido para interpretar a Brandon Walsh de 1990 al 2000, durante 245 episodios.
Reacción en Zapeando
Como no podía ser de otra manera, esta entrevista ha sido rescatada por el programa “Zapeando” de laSexta, en la que los colaboradores han querido comentar esta anécdota con la ironía y el humor que suelen caracterizar a este programa conducido por Quique Peinado. En primer lugar, el humorista Miki Nadal afirmó que consideraba que en esa época “Pitt prefirió oler a choto para dar una oportunidad al resto de hombres”. Por su parte, Valeria Ros ha despertado las risas de los presentes afirmando que ella “el moho de Brad Pitt” se lo comería.
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