El nudismo en piscinas públicas se ha convertido en una saludable práctica cada vez más aceptada en la Comunidad de Madrid, a pesar del auge del conservadurismo que experimenta la capital y que se ha visto reflejado en las elecciones municipales y autonómicas del pasado año.
Eventos especiales como el "Día sin Bañador", organizado por la Federación Española de Naturismo (FEN) y la Asociación para el Desarrollo del Naturismo (ADN), se han puesto en marcha desde hace años en las piscinas madrileñas buscando promover la tolerancia social hacia la desnudez.
Este año 2024, el 2 de junio se celebró el "Día sin Bañador" en la piscina del Lago en la Casa de Campo y el 9 de junio en la piscina municipal de Aluche. Durante estos días, los bañistas pueden decidir entre usar o no usar bañador, reivindicando así la naturalidad y la libertad de elección en las zonas de baño.
Para participar en estos eventos o simplemente para disfrutar de las piscinas durante la temporada, recomendamos reservar las entradas con antelación a través de las aplicaciones móviles y sitios web oficiales, ya que estas se agotan rápidamente.
¿Cuál es el origen del nudismo?
Antes de dar a conocer la curiosa piscina de la que trata este artículo, es preciso repasar un poco de historia: se cree que el nudismo comenzó a practicarse a principios del siglo XX sobre todo en Alemania, donde habían surgido movimientos naturistas. Fue precisamente en este país centroeuropeo durante el año 1898 donde se fundó el primer club de amantes de la desnudez, el cual defendía la integración total en la naturaleza a través del desnudo.
El movimiento naturista viajó hasta la isla de Rab, en Croacia, convirtiéndola en la cuna del nudismo en la década de 1930. La primera playa naturista de la isla la inauguró el presidente de la federación internacional de naturistas de Viena en 1934, atrayendo la atención de la realeza europea. Tal fue el interés que suscitaron que el rey inglés Eduardo VIII disfrutó en repetidas ocasiones del nudismo en Rab. Finalmente, el naturismo se popularizó en los años 60.
La Elipa, la única piscina que permite el nudismo en Madrid
La piscina del Centro Deportivo Municipal La Elipa, situada en el barrio de Moratalaz, se presenta como un oasis de frescura y diversión en pleno Madrid. Esta abrió sus puertas en 1997 y ha ido evolucionando notablemente durante los últimos años, convirtiéndose en un lugar emblemático para la comunidad durante los calurosos veranos de la capital.
Así, La Elipa ha sufrido diversas mejoras y renovaciones para satisfacer las nuevas necesidades de los bañistas. Entre estas actualizaciones se incluye la modernización de las áreas de vestuarios, la instalación de nuevas atracciones como toboganes acuáticos y zonas de juegos para niños, y la optimización de los sistemas de filtrado y tratamiento del agua para garantizar la máxima seguridad e higiene.
El aspecto más destacado de La Elipa es, sin duda, su solárium nudista, que proporciona un espacio seguro y separado de otras instalaciones que está pensado para aquellos que prefieren tomar el sol sin ropa. Desgraciadamente, este será el único lugar dedicado a la práctica del naturismo en todo el recinto municipal, pues aquellas personas que se encuentren desnudas en el solárium tendrán que ponerse el bañador para meterse en el agua.
Los beneficios del naturismo en la salud física y mental
Son numerosos los estudios que afirman que el naturismo ofrece una serie de beneficios psicológicos. En primer lugar, estar desnudo en un entorno natural promueve una sensación de libertad y relajación que puede reducir significativamente el estrés y la ansiedad. Se piensa que la conexión directa con la naturaleza sin la barrera de la ropa ayuda a mejorar el bienestar mental.
Además, el naturismo fomenta la aceptación del propio cuerpo tal como es. Al estar rodeado de personas de todas las formas y tamaños, se fomenta una visión más positiva y realista del cuerpo humano, reduciendo la exigencia y mejorando la autoestima.
En cuanto a los beneficios físicos, la exposición al sol sin ropa permite una mejor absorción de vitamina D, esencial para la salud ósea y el sistema inmunológico. Sin embargo, es crucial protegerse adecuadamente del sol para evitar quemaduras y otros daños en la piel.
Destaca también que la práctica del nudismo mientras se realizan actividades como nadar, caminar o practicar yoga en la playa, puede mejorar la circulación sanguínea al no estar restringida por la ropa ajustada.
¿Qué genera el nudismo en nuestra sociedad?
Socialmente, el naturismo también tiene sus ventajas. Las playas y piscinas nudistas suelen ser ambientes respetuosos, donde las personas pueden interactuar sin los prejuicios asociados a la apariencia física. Esto crea un sentido de comunidad y pertenencia que es difícil de encontrar en otros contextos.
No obstante, el nudismo también enfrenta desafíos. Por ejemplo, la fotografía no consentida en estos espacios es un problema que afecta a la privacidad y a la seguridad de los practicantes, entre los que se pueden encontrar menores de edad.
En búsqueda de la des-sexualización
Por su parte, desde la Federación Española de Naturismo (FEN) aseguran que "los beneficios principales de prescindir de la ropa cuando no es necesaria son, sobre todo, de liberación personal, de aceptación del propio cuerpo y de des-sexualiación de la natural desnudez".
También recuerdan que es importante "vivir la desnudez en familia, educando desde la infancia para evitar la efectividad en la comercialización del cuerpo a la que nos vemos sometidos desde que somos niños", y abogan por normalizar la desnudez especialmente para el baño "bañarse con ropa es absurdo y puede provoca muchos problemas en la juventud y la edad adulta".
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