Si todavía crees que Bruselas es una ciudad aburrida, debes leer esto. Hay un ambientazo en cualquier época del año. Multicultural, dinámica, divertida y moderna. Jóvenes de toda Europa acaban viviendo aquí y no se arrepienten. La única pega: el clima. Pero con una cerveza tan buena, se te puede hasta olvidar.
Nuestro lugar favorito es el Café Belga. A cualquier hora del día y de la noche. Bonito, amplio, buen sitio para conectarte, buena música y estupenda terraza. Un lugar ideal para un café, una comida ligera, un aperitivo, una copa o bailar cuando hay sesiones de dj´s. Está en la plaza Flagey, en Ixelles, un barrio lleno de bares y restaurantes donde no te vas a aburrir. Cerca de Porte de Namur en la coqueta plaza de Saint Boniface (en la frontera del barrio belga africano de Matongé) recomendamos Ultime Atome (cocina internacional) y Le Clan des belges (cocina belga) para comer o cenar.
La céntrica plaza de Saint Catherine y alrededores es otra zona fundamental. Nuestra sugerencia es tapear (buen pescado) en el Mer du Nord. Enfrente, un pequeño asturiano, ABC, que también está muy bien. En ambos los mejillones están a buen precio, no como en el resto de la ciudad. El De Markten Cafe cuenta con una agradable terraza y buena zona wifi en su interior por si quieres trabajar. Aceptable comida informal. Y hemos descubierto otro sitio estupendo: Via Via, tranquilo ambiente diurno y con muchos juegos de mesa. Por la noche, más marchoso y justo enfrente, puedes acabar en la sala Madame Moustache.
La zona de Saint Géry. Multitud de lugares para comer o cenar, bares con música (en algunos en vivo, como La Machine). Por poner un ejemplo, una cerveza en lo que fuera un antiguo mercado, Halles o una copa en Mappa Mundo.
Donde hay mucha vida es junto al cementerio de Ixelles, las cosas del surrealismo belga. Ambiente universitario y lugar de obligada parada y quedada para erasmus y nostálgicos de su juventud perdida. Me quedo con Le Tavernier con buena música y El Café, con toque mejicano para comer donde tienes además dj´s de martes a domingo.
Sabemos que te vas a acercar al Delirium Tremens porque todo el mundo lo recomienda y está en la zona cero turística. Aunque esté muy visto es imprescindible tomarse una cerveza allí. Récord Guinness por la mayor oferta de cervezas de grifo o barril. Difícil elegir.
También te antojarás de patatas fritas. Los bruselenses presumen de que las mejores son las de Maison Antoine. Tienen variada selección de salsas. Te puedes comprar un cucurucho y sentarte en cualquier terraza de la plaza Jourdan, en el corazón de la zona de las instituciones europeas. No lejos de allí te recomendamos un paseo por el parque Leopoldo y un brunch o hamburguesa en el Grand Central.
Si eres más intelectual y no quieres renunciar a una buena comida rodeado de libros, tu sitio es Cook & Book. Hay dos establecimientos, nosotros elegimos el de Place du Temps Libre. Hay muchos espacios, todos con guiños literarios. Recomendamos la zona de arte, cómics y música para los fines de semana y la de novela o historia entre semana.
Los fines de semana, paseo obligado por la rue Haute con tiendas y locales vintage, interesantes y diferentes, como L’Atelier en ville donde lo mismo puedes tomar un café, una cerveza con un bagel, encargar una mesa de madera para tu casa o comprarte ropa.
El barrio de Saint- Gilles, fuera de las antiguas murallas pero adentrándose en los circuitos visitables, es como una mezcla del madrileño Lavapiés con toque de Malasaña y algo de la Alameda sevillana. Pero sobre todo es una buena muestra, como Ixelles, de la maravillosa arquitectura Art Nouveau que brilla en muchas calles de Bruselas. Muy cool el Café Maison du Peuple.
Nos encantan los mercados, y el L’abatoir de Clemenceau es, sencillamente, espectacular. No sabes si estás en el corazón del Magreb, de África o de América. Pero estamos en Bruselas, el corazón de Europa. Maravilloso.
Ya sabes, a divertirte en una de las ciudades más marchosas de Europa.
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