¡Grande Zapatero! Lo ha vuelto a hacer. Ha vuelto a dejar en ridículo a toda la derecha junta, comenzando por Feijóo y terminando por Ayuso. Mientras era vilmente atacado por este mediocre PP, el expresidente socialista trabajaba en silencio y con enorme responsabilidad, para buscar solución al líder opositor venezolano Edmundo González.

La noticia saltó de inmediato a los medios nacionales y dejaba muy claro quienes había sido los bocazas y quienes son los que trabajan siempre en buscar soluciones: “Edmundo González abandona Venezuela y pone rumbo a España después de recibir asilo político. El opositor ha aceptado la oferta del Gobierno español, en la que el expresidente Zapatero ha tenido un papel clave”.

Zapatero siempre ha tenido tres valores de los que la derecha de hoy carece: enorme capacidad de trabajo, honestidad y altura política.  Y el trabajo casi siempre, termina dando resultados. El expresidente socialista ha liberado a “80 presos políticos” de Venezuela. ¿Cuántos ha liberado Ayuso, Feijóo o Aznar? Ninguno. Esta derecha ya no sabe ni lo que significa la palabra dignidad.

Sra. Ayuso y Sr. Feijóo, además de mentir, ¿saben ustedes hacer algo más? ¿Cuántos permisos dio el PP de Rajoy a venezolanos para que se instalasen en España? 125 permisos de residencia en siete años. ¿Saben cuántos ha dado el gobierno de Pedro Sánchez? 125.000. ¡Ya está bien de mentir!

Pero ¿cómo ha podido ocurrir esto?, si Ayuso había asegurado una y otra vez que el gobierno de Pedro Sánchez era cómplice de Maduro y que José Luis Rodríguez Zapatero era un soldado bolivariano. Una vez más la presidenta madrileña hace el ridículo. Algo que empieza a ser habitual en ella.

El PP ha sido muy duro con el expresidente socialista. Zapatero ha sido insultado, difamado, cuestionado y despreciado por el PP de Feijóo. Pero no lo han doblado, él no ha perdido ni un segundo en responder las terribles críticas de la derecha. Ha seguido haciendo su trabajo, sin hacer ruido. Y hoy Edmundo González está España gracias al trabajo y a la intermediación de Zapatero.

Pero Feijóo y Ayuso no darán su brazo a torcer. No reconocen sus errores. Han tenido una magnífica oportunidad para reconocer el trabajo diplomático de Zapatero y para poner en valor la gestión realizada por el gobierno de Pedro Sánchez al respecto. No lo harán. Esta derecha todo lo que no sea destruir no va con ella, por eso ahora están que rabian.

Y Feijóo ha vuelto a meter la pata. ¿Cuántas veces van ya? El mismo día que el aún líder del PP aparece en una entrevista en El Mundo diciendo que el Gobierno de España no hace nada por Venezuela, resulta ser el mismo día en el que España concede asilo político al líder opositor venezolano Edmundo González. No se puede hacer peor.

¿Es que ahora en el PP no se alegran con la noticia? Llevaban semanas y semanas pidiendo que el gobierno de España le ofreciera al opositor venezolano la posibilidad de recibir asilo; pero ahora, critican la decisión, argumentando que así se regala una victoria a Maduro. ¿En qué quedamos? ¿Nada le viene bien al PP? ¿Por qué no reconocen el trabajo bien hecho de Zapatero y Pedro Sánchez?

Al final ha quedo al descubierto la farsa del interés del PP por Venezuela, desde el viaje del selfie que el PP se niega a confirmar si pagó con dinero de todos los españoles, al patinazo de Feijóo, es innegable que para ayudar a Venezuela son mejores los hechos, como hace el gobierno de España que las vacías palabras de Feijóo o Ayuso. Quien dice que no es presidente porque no quiere, no puede seguir haciendo estos ridículos tan patéticos en política internacional.

Zapatero ha vuelto a estar a la altura. Siempre comprometido con las libertades, los derechos y los valores socialistas. Tanto, que tras los intentos del PP de reescribir la historia; tras los ataques desaforados de Feijóo; tras el discurso de odio de la derecha, decidió volver a escena y arrimar el hombro apoyando a Pedro Sánchez en las últimas elecciones generales.

No sabemos cuánto influyó el trabajo, el esfuerzo y los muchos kilómetros de Zapatero en las elecciones para que Pedro Sánchez sea hoy presidente del Gobierno y España un país mejor y más plural, pero si no lo hubiese hecho, tal vez la situación sería diferente. Esta es su grandeza y generosidad. Feijóo sabe de la importancia de la campaña de Zapatero, y no se lo perdona, de ahí su odio visceral a la figura del expresidente socialista.

Pero Zapatero siempre ha defendido España. De hecho, en 2007 cuando Hugo Chávez insultó a Aznar, él salió de inmediato a defenderlo, sin dudarlo. Algo que el PP jamás hará. De hecho, cuando Milei insultó al presidente Pedro Sánchez, Feijóo no lo defendió. Esta es la diferencia entre un hombre de Estado y otro que no lo es y no lo será.

Y termino. José Luis Rodríguez Zapatero siempre trabajará por la libertad y por la democracia. Pese a quien pese. Si la derecha piensa que sus insultos pueden rozarle, están muy equivocados. Zapatero siempre ha tenido muy claro que lo mejor para España está por encima de todo. ¡Grande Zapatero!

boton whatsapp 600