Ahora que Francia está a punto de votar un nuevo Presidente, Mr Hollande, defensor de aplicar medidas de inversión para resucitar a la moribunda economía europea, sale frau Merkel diciendo que ella ya lo decía, que hay que crecer.

Con tal de seguir gobernando la vida de gran parte de Europa esta señora es capaz de decir lo contrario que dijo el día anterior. Lo que ocurre es que frau Merkel ha dicho en voz bajita que medidas para relanzar la economía, vale, pero a coste cero, sin poner un duro.
Y eso es imposible. Esta mujer criada y educada en la Alemania comunista es dogmatica, inflexible y egocéntrica. Si realmente los políticos europeos están dispuestos a dar un giro a sus políticas con la llegada de Hollande tendrán que sacar dinero de debajo de las piedras, de lo contrario viviremos un nuevo fracaso.

Mientras tanto su “mozo maletero”, el Sr Rajoy sigue insistiendo en que austeridad y sólo austeridad y espera a que frau Merkel le dé instrucciones.

Y sigue con sus viernes de pasión cortando de cualquier lugar sin orden ni concierto, sin sopesar el daño que está causando a la población (muchos de ellos le votaron), en la mayoría de los casos irreparable, incluso pasándose por el arco de la Moncloa la Constitución y sus afirmaciones.

Y mientras tanto intenta calmar a los españoles diciéndonos frases contradictorias, afirmaciones manipuladas y eso sí siempre escondiéndose detrás de sus ministros y de su vicepresidenta.

El no da la cara, no vaya a ser que alguien se la parta. Y sigue afirmando a través de sus portavoces que España necesita reformas estructurales algo que no es lo mismo que recortar, de la misma forma que reestructurar no es lo mismo que desregular o sea quitar las normas para que cada uno haga lo que le plazca. Claro que los únicos que pueden hacer esas cosas son los que poseen el dinero, el poder.

Pero ni Rajoy ni sus Ministros prestan la menor atención al significado de las palabras. Tenemos que ver a personajes del PP hablando de austeridad cuando ellos han gastado a raudales invirtiendo donde no hacía falta, quedándose con las comisiones y regalando millones al yerno del Rey and company. Y esos mismos son los que después nos quieren dar lecciones diciéndonos que “todos los españoles han vivido por encima de sus posibilidades”. Y eso no es así. Unos han derrochado, malgastado y robado y otros no. Esa es la peor herencia de Rajoy, la de sus propios compañeros de partido.

O a Ministras de Sanidad como la señora Mato dando como solución al gasto sanitario el echar del actual modelo a los inmigrantes sin papeles, el 0´1% del gasto. El chocolate del loro.

En primer lugar se trata de una medida inmoral por su falta de ética y solidaridad y en segundo lugar significa que a partir de ahora ya no irán al ambulatorio sino a urgencias que por si éramos pocos, seremos más. Y si alguno o varios tienen tuberculosis (hecho comprobado) a partir de ahora lo compartirán en el metro, autobús o bares con el resto de la población. Esa es la solución de Mato.
El Ministro José Ignacio Wert aseguraba el pasado martes que “el recorte en educación y sanidad es una cuestión urgente, de supervivencia de los pilares centrales del Estado del bienestar”. O sea que para mantener los pilares decide cargárselos………..
Pero a estos señores no les importa jugar con las palabras. Y creen que a base de mentir y cortar los mercados y Merkel se olvidarán de nosotros, pero eso se ha visto que no es así, sino todo lo contrario.

Nos siguen atacando y vapuleando y eso les desconcierta.

Los ciudadanos no son tontos, pero los banqueros, las agencias de calificación y los fondos de inversión, tampoco. Son avaros y amorales pero listillos. Su objetivo: adelgazar al máximo los Estados para que todo pase al sector privado, van camino de conseguirlo gracias a las políticas de la señora Merkel y sus porta maletas.

Y ahora resulta que se asustan (en el fondo son muy cobardes) de que el socialista Hollande gane las elecciones francesas. Este candidato, moderado y un tanto gris, lo único que ha dicho es que sólo con austeridad no se va a ningún lugar y que hay que relanzar las economías. Sólo ha dicho eso y de repente todos se han levantado alzando la mano y diciendo “yo ya lo decía”.

Y mienten. Ni lo decían ni lo querían pensar. Ni Merkel ni los mercados quieren inversiones públicas, sólo privadas.

Quizás por esa razón y porque queremos que todo el mundo hable claro, algo elemental en una democracia, dos Premios Nobel de Economía Paul Krugman y Stiglitz así como el movimiento recientemente constituido en España “Economistas frente a la crisis” (http://www.economistasfrentealacrisis.com) defienden los mensajes nítidos.

Y afirman : “los economistas debemos declarar que no son los mercados los responsables de la crisis. Los responsables son los No mercados, en los que las barreras de entrada y de salida son infranqueables, en los que la información es privilegio de pocos, en los que la concentración oligopolística adquiere mayor poder que el gobierno de los ciudadanos”.

La citada organización reivindica la austeridad pero con peros: “Austeridad siempre. Derroche o despilfarro nunca. Pero austeridad no es déficit cero. Es eficiencia en la inversión y en el gasto”.

Según el nazi Goebbels, una mentira repetida mil veces se convierte en verdad” aunque Anatole France, Premio Nobel de Literatura matizaba: “una necedad repetida por mil bocas no deja de ser una necedad”

Mercè Rivas Torres es periodista y escritora