Lourdes regresa caminando a casa, no muy deprisa, está embarazada. Se sobresalta cuando ve en la puerta de su vivienda un grupo de policías que acompañan a dos hombres con traje que se presentan ante ella como funcionarios judiciales. Mariano Rajoy continúa su rueda de prensa y asegura que el Consejo ha sido un éxito, porque se han tomado decisiones muy importantes para conseguir en un futuro la unión bancaria europea. Felip Puig, tras un comunicado del sindicato mayoritario de los Mossos D’Esquadra pidiendo que los dejen fuera de la guerra política, declara que sus palabras han sido malinterpretadas.
A Lourdes le dan unos minutos para que coja lo mas imprescindible de lo que hasta ese momento era su casa. La cerradura de la puerta la han cambiado mientras ella estaba fuera. La jueza de Córdoba no había notificado el desahucio para evitar que pudieran organizar una movilización contra el desalojo. Mariano Rajoy bromea en Bruselas sobre la cantidad que necesitan los bancos “sólo supone el 4% de nuestro Producto Interior Bruto”. Soraya Sáenz de Santamaría recuerda a los Mossos D’Esquadra que están obligados a obedecer la Constitución.
José Manuel, el marido de Lourdes, llega corriendo a casa. A pocos metros de la puerta se encuentra a su esposa junto a siete bolsas de plástico de color negro, donde ha guardado algo de ropa y lo que quedaba de comida en casa. Tiene los ojos rojos y la mirada perdida en el infinito. 72.000 euros de deuda con el Banco de Santander impedirán que Lourdes pueda cumplir lo que les ha dicho esa mañana a sus hijos en la puerta del colegio. Ya no tienen casa donde regresar. Mariano Rajoy embarca en un avión oficial que lo llevará esa misma tarde a Vigo para participar en la campaña a las elecciones gallegas, en el mitin es ovacionado por miles de fieles seguidores. Felip Puig recibe el apoyo en pleno de sus compañeros en el Gobierno de la Generalitat.
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