El tema de la semana en Twitter ha sido el fin de Twitter. En efecto, la gracia (casi divina) de esta red era su brevedad: 140 caracteres cuyo resultado solía ser una frase o al menos un intento de frase ingeniosa. Todo el mundo tenía algo que decir y lo decía de forma concisa, sintética, sin aburrir a las ovejas, ¡al grano! Sin embargo, nada dura para siempre.

El dinero manda y ante los magros resultados económicos Jack Dorsey y compañía han decidido que quieren parecerse cada vez más a su exitoso adversario: Facebook. Dentro de poco tendremos un Twittbook. El martes por la noche saltaba la noticia de que Twitter iba a probar de forma experimental en algunos usuarios elegidos la posibilidad de tuitear con un límite de 280 caracteres, el doble que hasta ahora. Aquí tenéis el primer tuit escrito de esta manera, que como no podía ser de otra manera es del propio Jack:

Según explica Twitter, el cambio se debe a que estábamos en desventaja con los chinos y los japoneses, los cuales podían expresarse de sobra en 140 al tener un idioma con menos caracteres y en cambio nosotros no. Sin embargo, este usuario le demostró enseguida que si quieres, puedes:

De momento son muy pocos los “elegidos” que pueden tuitear en 280. Por supuesto, como soy Dios, yo soy uno de ellos. Y decidí utilizarlos para el bien:

No sólo a no me ha gustado el cambio a mí. La inmensa mayoría de usuarios se ha manifestado en contra:

¡Queremos poder editar, no más caracteres!

Es hasta incómodo de leer:

Agotador:

Y muy peligroso:

Sólo lo han celebrado en un sitio:

A este paso acabaremos así:

Aunque oye, igual es que es envidia:

Para alguna cosa sí que viene bien:

Lo que os digo:

¡Ahora que nos habíamos acostubrado a los odiosos hilos!

Muchos tuiteros probaban a ver si ellos eran los elegidos del llamado “Club de los 280” pero casi ninguno lo era. Tranquilos, si estáis como locos por probar esta tontería y Twitter no os ha bendecido, aquí tenéis un truquillo:

Yo por mi parte pienso seguir escribiendo en 140. Los mejores tuits se elaboraron con muy pocas palabras: