Mientras Cristina Cifuentes apura el cáliz de su defenestración como presidenta de la Comunidad de Madrid, renunciando a su acta de diputada y abandonando la política, el partido de Mariano Rajoy Brey, estrena un nuevo argumentario a distribuir masivamente en medios afines y tertulias.

La palabra clave es 'honestos'.  De este modo describen a los nuevos líderes de la Comunidad de Madrid y de la dirección del PP madrileño. A este calificativo habría que añadir el de “potentes,” ahora en boca de los populares para describir a los candidatos a regir los pueblos de la geografía metropolitana. Prometen pues un futuro luminoso con políticos sin tacha y de muy alto nivel.

¿Es así? Tenemos a un presidente en funciones, Ángel Garrido, que sin duda será confirmado en el cargo por el pleno de la Asamblea, ya que el PP cuenta aquí con el apoyo de Ciudadanos. Garrido, como bien relata Marisu Moreno en El Plural, estudió en el colegio de Tajamar, solo para chicos, como es habitual en los centros del Opus Dei.

A este respecto, el ultraconservador digital Infovaticana, reprochaba en 2016 al entonces número 2 de Cristina Cifuentes lo siguiente: “…resulta irónico que Garrido oculte en su biografía que estudió en un colegio privado, cuando protagonizó una campaña de acoso a Tomás Gómez en 2011 por el mismo motivo, durante la campaña de las elecciones autonómicas (en aquel momento era un fervoroso aguirrista) …”

Se diría, que como a su predecesora y buena amiga Cristina Cifuentes, a Garrido también se le atraganta el tema académico.

Pero si vamos a los otros dos honestos colegas según el calificativo popular, designados como sucesores en el PP madrileño, veremos que en ambos casos colea la sombra de la Gürtel haciendo guiños desde un pasado reciente.  Así, Juan Carlos Vera, que será el secretario general autonómico, se ha visto citado en informes de la UDEF en relación con Pablo Crespo, el número dos de la trama, y con Álvaro Pérez Alonso, denominado el 'Bigotes'.

También sobre su compañero el aristócrata Pío García Escudero pende la tacha de la contabilidad B del tesorero Bárcenas, en razón a un préstamo (devuelto) de un millón de pesetas. El conde de Badarán llamado a presidir el partido de Madrid hasta el próximo Congreso regional vivió otro conflictivo asunto de la mano de Esperanza Aguirre, condesa consorte de Bornos: “Pregunten a Pío, pío, pío” señaló en 2009 la inefable Aguirre, tirando balones fuera cuando los periodistas le preguntaban por irregularidades contables relacionadas con Fundescam, la Fundación del PP de Madrid que presidía el tal don Pío.

Con estos antecedentes falta por conocer la potencia de otros futuros candidatos.  Don Mariano debería recordar aquella sabia frase: “Dime de lo que presumes y te diré de lo que careces”.