El año 2017 no fue nada bueno en las carreteras españolas con respecto a la siniestralidad y ahora, gracias al Barómetro de Averías elaborado por el RACE, ha revelado que tampoco fue un buen año a nivel de averías. Además, precisamente las averías más comunes en carretera se debieron a factores totalmente controlables por los conductores.

Durante 2017, los servicios de asistencia del RACE atendieron nada menos que 1.488.277 incidencias en carretera, de las cuales más de 900.000 fueron asistencias en carretera, un 18% más que las intervenciones realizadas en 2016. No obstante, hay que destacar que el 49,7% de los coches atendidos pudieron continuar su viaje con total normalidad tras ser atendidos.

Del total de las averías que se produjeron en carretera y que atendió el RACE durante 2017, el mal mantenimiento fue la causa principal de las mismas. De hecho, en muchos casos los usuarios prescindieron de las revisiones básicas que aconsejan todos los profesionales antes de realizar viajes largos como los que se producen en verano.

Junto con la falta de mantenimiento, otra de las causas destacadas por el RACE fue el constante aumento de la antigüedad del parque español de automóviles lo que, de forma natural, provoca que haya un porcentaje mayor de averías en carretera. Actualmente, el parque automovilístico español tiene una antigüedad de 12 años y si a esto le sumamos la reiterada falta de inversión en infraestructuras, las cifras crecen notablemente.

Averías más comunes en 2017

Así, las averías más comunes en 2017 derivadas de esta falta de mantenimiento y de la antigüedad de los vehículos fueron las siguientes:

  1. Problemas con la batería: 165.306
  2. Problemas con los neumáticos: 78.900
  3. Accidentes de tráfico: 45.014
  4. Averías de motor: 43.158
  5. Avería de la bomba de gasolina: 28.654