En los últimos años, Javier Cárdenas ha estado abonado a la polémica gracias a su programa de radio, Levántate Cárdenas, pero sobre todo por la barra libre en la TVE de Mariano Rajoy con su espacio Hora Punta, donde daba cabida a teorías sin ninguna base científica como los falsos peligros de las vacunas. Sin embargo, un nuevo episodio oscuro le señala y esta vez viene del pasado, de su época persiguiendo a lo que llamaba frikis. Unos frikis que no le olvidan, como es el caso de Paco Porras, el vidente de las hortalizas, a quien acusa de todos los males, incluso de la muerte de su madre.
Porras reapareció este fin de semana en el Sálvame Deluxe de Telecinco para comentar cómo era su vida ahora, tras 11 años alejado de las cámaras. El vidente famoso por asegurar que leía el futuro en frutas y verduras cargó contra Javier Cárdenas, al que acusaba de sus males. “Me fui porque estaba hasta el mismísimo gorro de tanto friki encima”, comentó.
En concreto, Porras se refirió a la película de Javier Cárdenas titulada FBI: Frikis Buscan Incordiar, donde gastaba bromas pesadas a personajes televisivos como Carmen de Mairena, el Pozí, Arlequín o la Bruja Lolas. También a Paco Porras, al que ató a una lancha y fue arrastrado mar adentro bajo la excusa de haber firmado un contrato para hacer “un crucero”.
Porras recordó el momento, acusando a Cárdenas de haber provocado la muerte de su madre: “A raíz de mi lesión, que me dejó paralítico 14 meses, en silla de ruedas y con muletas. Mi madre no soportó eso. Enfermó de los nervios y la perdí joven”.
“Desde aquí tengo que denunciar a este sinvergüenza, chulo, prepotente, arrogante que es Javier Cárdenas que me ha dejado lisiado para toda mi puta vida y, encima, se ha llevado toda la pasta y a mí no me ha pagado ni un duro”, llegó a decir Porras en Sálvame Deluxe. Unas acusaciones que tuvo que parar Jorge Javier Vázquez, quien le recordó que el asunto se puso en manos de la Justicia y que si no había sido indemnizado es porque todo fue legal. Incluso le pidió que no acusase a Cárdenas al no poder defenderse. “Sí, pero el que está lisiado soy yo. Y el que está arruinado soy yo”, alegó Porras.