Este jueves 8 de agosto solo hay un tema de conversación en nuestro país, y no es la nueva ola de calor que llega. Se trata del regreso del expresident de la Generalitat de Cataluña Carles Puigdemont a territorio nacional tras siete años huido de la justicia a Waterloo. Esto, especialmente su desaparición después de dar un mitin en Barcelona, está copando todos los titulares en esta jornada, pero también muchos comentarios.
Uno de los que ha reaccionado a lo que está sucediendo en el marco de la investidura del socialista Salvador Illa ha sido el periodista Jordi Évole, que ha tirado con cierto humor y sorna de una famosa serie de la aplicación Netflix para definir la nueva huida de Puigdemont. Un movimiento que ha provocado que los Mossos d'Esquadra hayan emprendido la 'Operación Jaula' para dar con el paradero del dirigente de Junts.
Jordi Évole define la huida de Puigdemont
Desde un escenario en el paseo Lluís Companys de Barcelona, a solo unos metros del Parlament de Catalunya, el expresident catalán ha dado todo un discurso en el que ha sido el primero desde que saliera huyendo a Bélgica tras el referéndum ilegal del 1 de octubre. Desde ahí, y rodeado de simpatizantes y votantes, Carles Puigdemont ha instado a no renunciar a la autodeterminación de Cataluña, señalando al mismo tiempo que un referéndum "ni es ni será nunca un delito".
"Aunque les hemos visto su cara de represores, hoy he venido aquí para recordarles que aún estamos aquí", ha sostenido después de afirmar que la autodeterminación es un derecho que pertenece a los pueblos. Pero también ha hablado de su posible arresto, dado que pesa sobre él una orden de detención. "Hoy muchos piensan festejar que yo sea detenido y pensarán que el escarnio nos y os disuadirá; que para escarmentar vale la pena incumplir una ley aprobada por su parlamento", ha añadido.
Tras esta intervención, el dirigente de Junts ha emprendido una marcha hacia el Parlament de Cataluña acompañado de los representantes de las entidades y partidos políticos para asistir al pleno de investidura de Salvador Illa como president de la Generalitat. Pero no ha sido así, y en mitad del paseo ha desaparecido entre la multitud de personas que se habían congregado en las calles del Parc de la Ciutadella.
Ante esto, se han sucedido muchos comentarios en las redes sociales, la mayoría usando el humor y los memes para calificar lo sucedido. Uno de ellos ha sido el periodista Jordi Évole, quien ha definido la huida de Puigdemont tirando de una famosa serie que se puede ver en Netflix. "Pues no está mal la nueva temporada de Lupin", ha publicado el presentador, en referencia a la producción sobre las aventuras de Assane Diop, un ladrón que se suele escabullir de la Policía en las calles de París.
Hace solo unas semanas, el propio Évole se pronunciaba sobre la victoria del PSC en Cataluña y de la investidura del dirigente socialista. Lo hacía con una frase cargada de dardos para la derecha y la ultraderecha, pero también para el independentismo que representa, entre otros, el líder de la oposición y dirigente de Junts.
Activada la 'Operación Jaula'
La idea, o incluso la promesa de Puigdemont, era asistir al debate de investidura del dirigente socialista. De hecho, nada más acabar su intervención a las puertas del Parlament ha iniciado su camino con toda su comitiva hacia la puerta de la institución. Sin embargo, los expresidentes Artur Mas y Quim Torra, junto a la presidenta de Junts, Laura Borràs, y otros dirigentes de la formación que lidera Puigdemont, han llegado sin él. Ni rastro del expresident.
Ante esto, los Mossos d'Esquadra han activado la llamada Operación Jaula para tratar de evitar la huida del expresident de la Generalitat. Así, por ahora el cuerpo policial catalán desconoce dónde se encuentra el dirigente catalán, en paradero desconocido desde su intervención pública, pero sí saben que se desplaza en un vehículo, del que conocen modelo, color y matrícula.
En este marco, ya se han establecido controles en toda la frontera, especialmente en los puntos de paso a Francia, mientras la jefatura de los Mossos se ha desplazado a la Cámara autonómica, donde han organizado un Centro de Coordinación en el que están manteniendo reuniones constantes. En concreto, se ha activado presuntamente el nivel 2 de tres que contempla este dispositivo, y son las cúpulas policiales de los Mossos y la Policía Nacional quienes la ponen en marcha.
El objetivo es intentar que los fugitivos, en este caso Puigdemont, no puedan escapar de un perímetro determinado. Con muchas unidades, distribuidas estratégicamente, se crea un cerco alrededor de un área, en este caso todos los accesos de entrada y salidas de Barcelona, tanto a pie como por carretera. Algunas fuentes aseguran que le tienen localizado mientras otras afirman que no, pero el protocolo está activado por tierra, mal y aire.