La guerra desatada en Cantora entre Isabel Pantoja y Kiko Rivera ha sido el plato principal de las tertulias y revistas el corazón durante estos últimos días. Unas hostilidades que no tiene visos de solución en el corto plazo y que ha traspasado todo tipo de fronteras. De hecho, el caso de la “herencia envenenada” ha evidencia la ‘división’ en el seno de Mediaset, con el ‘enfrentamiento’ entre Jorge Javier Vázquez y Ana Rosa Quintana.

Tras la primera emisión de Cantora: la herencia envenenada – el viernes llegará el segundo episodio -, se ha generado una afrenta entre dos bandos en todos los estratos de la sociedad, incluso en la política. Esta división no iba a ser menos en las entrañas de TeleCinco, donde se evidencia la divergencia entre las dos corrientes personificada en sus presentadores estrella.

La relación de Jorge Javier Vázquez con Isabel Pantoja ha sido como una montaña rusa, con idas y venidas constantes. En este punto de la historia, el presentador de Sálvame se ha declarado como uno de los defensores más férreos de Kiko Rivera. Quedó patente tras la primera emisión del cisma en Cantora.

“Kiko Rivera detesta con toda su alma a Isabel Pantoja, al personaje, él lo que quiere es una madre”, sentenció Jorge Javier. El presentador teoriza con que la tonadillera no asume que “ya no es lo que era” y, en lugar de salvaguardar su familia, se ha centrado en “proteger fundamentalmente a Isabel Pantoja”. Esto explicaría, según su hipótesis, las maniobras de la cantante para atacar a su hijo con diversos periodistas.

La posición de Jorge Javier Vázquez la comparte, en líneas generales, colaboradoras como Mila Ximénez, quien acusa a la tonadillera de haber robado a Kiko Rivera “su niñez y su adolescencia”, señalando a Agustín Pantoja como detonante del conflicto entre la madre y el hijo. En Lecturas, aseguraba que “quien convive con ella en Cantora no tiene la mente sana”.

María Patiño también se ha alineado junto a Kiko Rivera. La periodista ha condenado por activa y por pasiva los problemas económicos que Isabel Pantoja ha generado a su hijo a raíz de la herencia de Paquirri. “Cuando esta señora se vaya, Kiko Rivera o hereda deudas o no hereda nada”, sentencia.

Sin embargo, existe otra corriente divergente en TeleCinco representada por Ana Rosa Quintana. La presentadora de El Programa de Ana Rosa lidera esta corriente de opinión y critica las maneras de Kiko Rivera para afrontar este problema. No cuestiona su derecho a reclamar lo que es suyo, pero cree que su hijo debería haber tratado estos temas en privado.

"Me parece impresentable que estas cosas se hagan en público, porque es su madre y si tiene algo que decirle se lo tendrá que decir a ella", aseveraba en su programa la presentadora. En esta misma línea se mueve Paloma Barrientos, quien censuraba que “a los 36 años no puedes estar hablando de las infancias difíciles”, sino que “tienes que solucionar”.

Belén Esteban y Joaquín Prat completan esta facción de Mediaset contraria a Kiko Rivera. La de Paracuellos sostenía que ella hubiera acogido a su madre y “me la hubiera llevado al notario de Fuengirola para que me lo hubiese explicado todo”. “Me da muchísima pena Isabel, pero tiene que mover ficha y hacer algo”, sentencia.

Prat, por su parte, entiende que Kiko Rivera “destrozó la imagen pública de su madre de manera inmisericorde y sin ahorrar ningún adjetivo”. El presentador ha acusado al hijo de Pantoja de hacerlo “en televisión y por dinero”.