Como si de un comisionista de la industria armamentística se tratase, a Carlos Herrera le ha sentado especialmente mal la decisión de que las Fuerzas Armadas no acudan al Salón de la Educación de Barcelona en su próxima edición.
Tanto que, pese a que ya conocíamos su aversión por la alcaldesa de Barcelona, el presentador de la cadena de los obispos no ha escatimado en descalificativos para ridiculizar a Ada Colau. Después de llamarla “perfecta ignorante”, ‘Carlitos’ la imitaba como si la alcaldesa hubiera tenido una ocurrencia: “No, es que… Nosotros la paz… Tiene que ser… Será diferente… Porque la paz y la guerra…”.
Seguidamente, Herrera aprovechaba para relacionar a la alcaldesa de Barcelona con lo que él denomina como “chusma”. El monologuista de la COPE aseguraba que la decisión se había tomado para “darle gusto a Ada Colau, para darle gusto a independentistas, podemitas y toda esa chusma política”.
A continuación, y pese a no tener mucha relación, utilizaba uno de los argumentos clásicos que la derecha mediática repite estos meses hasta la saciedad insinuando un chantaje de los independentistas al gobierno: “(…) Algún tipo de contraprestación para el gobierno de Sánchez? Ahhh… No lo sé”.
Pero el presentador de COPE ignora completamente el cariz democrático que ha tenido la decisión de que las Fuerzas Armadas no cuenten con un espacio en este Salón. Ha sido la sociedad civil barcelonesa y catalana la que, a través de diversas organizaciones, llevaba años pidiendo la separación del ámbito militar y el educativo. Esa demanda se trasladó tanto al pleno municipal como al del Parlament de Cataluña donde, en ambos casos, se avaló esa petición por amplia mayoría de los grupos.
