Apple apuesta fuerte por la seguridad de su Apple Inteliigence, un sistema de inteligencia artificial, y tanto es así que ha ofrecido una recompensa de hasta un millón de dólares a cualquiera que pueda hackearlo. En concreto, la compañía anunció este jueves que está invitando a “todos los investigadores de seguridad, o cualquier persona con interés y curiosidad técnica" a realizar "su propia verificación independiente de nuestras afirmaciones”.
El sistema de inteligencia artificial, según Apple, cuenta con encriptación de extremo a extremo y elimina inmediatamente la solicitud de un usuario una vez completada la tarea, y ha desafiado al público a probar la seguridad de 'Private Cloud Compute', los servidores que recibirán y procesarán las solicitudes de los usuarios para Apple Intelligence cuando la tarea de IA sea demasiado compleja para su procesamiento en el dispositivo.
El sistema de inteligencia artificial de Apple
La computación en la nube privada (PCC, por sus siglas en inglés) es un sistema inteligente diseñado para procesar de manera privada la inteligencia artificial en la nube, precisamente el que respalda Apple Intelligence.
Tras su anuncio en junio, en el marco de su evento anual de desarrolladores, Apple dio acceso temprano a auditores externos e investigadores de seguridad seleccionados a los recursos que permiten inspeccionar PCC, incluid el entorno de investigación virtual.
Ahora, Apple ha anunciado que abre a estos recursos al público, para los investigadores de seguridad y privacidad y personas "con curiosidad técnica" puedan "realizar su propia verificación independiente", como recoge en su blog oficial de Seguridad.
Estas personas podrán acceder a una guía de seguridad de computación en la nube privada, que incluye detalles técnicos de los componentes de PCC y su funcionamiento, así como al código fuente de determinados componentes y al entorno de investigación virtual, para realizar un análisis de seguridad directamente desde un Mac.
Los participantes pueden recibir entre 50.000 y un millón de dólares, en función de la gravedad de los fallos notificados.