La pareja formada por el piloto de Fórmula 1 Fernando Alonso y la periodista deportiva Melissa Jiménez ha confirmado que están esperando su primer hijo en común. Después de semanas de rumores y conjeturas, la noticia ha sido confirmada por fuentes cercanas a la pareja y la revista '¡Hola!', que revela que Melissa ya está de alrededor de seis meses de embarazo. Para Melissa, de 38 años, no será su primer bebé, ya que tiene tres hijos fruto de su anterior relación con el futbolista Marc Bartra. Pero para Alonso, de 44 años, este será su primer hijo, cumpliendo así un deseo personal que había compartido públicamente en varias ocasiones.
Un embarazo "secreto"
Según la información disponible, este nuevo miembro de la familia se espera para marzo de 2026, si todo sigue su curso habitual. El estado del embarazo de Melissa explicaría su prolongada ausencia en las últimas carreras del campeonato de F1: no acudió al Gran Premio de Abu Dabi y tampoco apareció en los habituales compromisos como presentadora o reportera de motor. La relación entre ambos comenzó en 2023, cuando coincidieron en los circuitos de Fórmula 1 (él como piloto, ella como periodista especializada). Desde entonces, han procurado mantener una discreción relativa con su vida privada, lo que convierte esta confirmación en un paso importante y muy asentado en su historia personal.
Para Fernando Alonso, la paternidad representa la materialización de un deseo que había expresado públicamente en 2024: formar una familia.Esta noticia llega en un momento clave de su carrera, ya que su contrato con Aston Martin concluye a finales de 2026, lo que abre la puerta a grandes decisiones sobre su futuro profesional. Para Melissa Jiménez, este cuarto hijo implica reorganizar sus compromisos profesionales, algo que ya ha comenzado: ha dejado en pausa su labor informativa en el paddock y se habría centrado en su bienestar y el del futuro bebé. Además, la noticia ha generado una gran repercusión mediática.
Una nueva etapa vital
Así, este embarazo marca el inicio de una etapa muy esperada para la pareja: convertir su relación profesional en una familia consolidada. Para muchos, representa la parte más humana del piloto, alejándola del ruido de las carreras y recordando que, detrás del asfalto, hay también deseos personales, sueños familiares y nuevas prioridades. No hay aún declaraciones oficiales formales de Alonso o Melissa, pero la confirmación mediática (y el estado avanzado del embarazo) hacen que casi todo apunte a que muy pronto la noticia será compartida de forma pública por ellos mismos.
