Varias empresas se han visto abocadas a anunciar ERTE por la guerra en Ucrania. Fue el pasado 24 de febrero cuando Rusia comenzó su invasión a Ucrania, provocando una guerra que está afectando masivamente en los mercados internacionales. Unos de los sectores afectados es el del acero y el de la cerámica, por los precios del gas y por el corte de suministro de materia prima de Ucrania.

La última compañía en sumarse a un ERTE por la guerra en Ucrania ha sido la acerera Roldán, en Santo Tomás de las Ollas, León, que se presenta como una de las primeras empresas leonesas que toman medidas ante el incremento de costes del mercado. Roldán planteará un ERTE cuyo alcance está por determinar en una plantilla que en la actualidad alcanza los 400 trabajadores.

En el mismo sentido, la siderúrgica Acerinox ha planteado también la negociación y aplicación del expediente de regulación temporal de empleo en la factoría de Palmones (Acerinox Europa) en Los Barrios, en Cádiz, como consecuencia de la situación económica y el aumento de costes.

Lamosa ha presentado un ERTE que afecta a alrededor de 300 trabajadores que afecta a Roca Tiles Spain, la división cerámica que compró en agosto de 2021. La Asociación Nacional de Fabricantes de Fritas, Esmaltes y Colores Cerámicos (ANFFECC) también ha mostrado su preocupación por la afección de la guerra y anunció una nueva subida de precios para intentar paliar la sangrante pérdida de rentabilidad de la industria. En este sentido conviene mencionar que Rusia es el séptimo país de destino de la industria de esmaltes española y junto a Ucrania sumó una facturación de 44 millones de euros para el sector.

En Andalucía, el principal proveedor automovilístico de la comunidad, Valeo, ha acordado un ERTE con el comité de empresa de su planta en Martos, Jaén, por la falta de componentes procedentes de Ucrania. Valeo, con más de 3.000 empleos directos fabrica en Martos sistemas de iluminación para las principales marcas de automoción, siendo la principal industria de Jaén. Pero este ERTE y la caída de producción en Valero puede tener consecuencias en cadena no solo en sus auxiliares, sino también en toda la industria del automóvil a la que abastece. Está previsto que el ERTE se aplicará durante veinte días laborables como máximo hasta el 31 de mayo de 2022.

También la multinacional estadounidense General Mills ha planteado un expediente de regulación de empleo para prácticamente la totalidad de su plantilla en la factoría de San Adrián, Navarra. Esta empresa es la fabricante de productos Old El Paso y Nature Valley, e importa la mayor parte de aceite de girasol de Ucrania. General Mills prevé 42 días de regulación para la plantilla.

Por último, otra empresa que ha anunciado a su comité de empresa que parará durante una semana es la siderúrgica cántabra Reinosa Forgings & Castings. Lo hace en sus instalaciones de Acería y Fundición y notifica el ERTE por el incremento de los costes energéticos. La compañía considera inasumible seguir produciendo con los precios actuales de la energía.

Díaz sopesa activar un macro ERTE

El Gobierno está ultimando un paquete de medidas para mitigar el impacto económico de la guerra desatada en Ucrania por la invasión de Rusia y, en particular, amortiguar los efectos sobre las empresas y los hogares de la escalada de la inflación, que puede verse intensificada por las consecuencias sobre los precios energéticos del conflicto bélico.

En este contexto, el Ministerio de Trabajo está sopesando la posibilidad de activar el denominado mecanismo RED (que incorpora la reforma laboral como herramienta de flexibilidad interna, en paralelo a los ERTE), en su modalidad cíclica, para que puedan acogerse las empresas de los sectores más afectados por el aumento de los precios de la energía.