Repsol ya no es sólo una petrolera, ha dado el paso definitivo para ser una compañía de energía. Se marcó el objetivo de diversificar su negocio y lo ha hecho con una inversión de 750 millones de euros.

La petrolera entra en el sector eléctrico y de gas con la compra de cinco centrales eléctricas en España a los fondos propietarios de Viesgo, así como su comercializadora de gas y electricidad. Entre todas suman una capacidad instalada de 2.350 megavatios. Según ha anunciado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores, Repsol adquiere tres centrales hidroeléctricas con una capacidad instalada de 700 megavatios localizadas en el norte de España y dos centrales de ciclo combinado de gas: una en Algeciras (Cádiz) y otra en Escatrón (Zaragoza). Entre las dos suman una capacidad de 1.650 MW.

La petrolera quiere ser una empresa más “verde”, y para conseguirlo irrumpe en el negocio eléctrico y gasista. Cuando anunció su plan estratégico para 2018-2020 avanzó que pensaba invertir en total 15.000 millones y reservaría 2.500 millones para entrar en nuevas formas de generación de bajas emisiones. Según explicó Josu Jon Imaz, consejero delegado, el grupo está hablando con distintas compañías para comprar activos, aunque remarcó que si no avanzaban por ese camino lo harían por el orgánico a través de inversiones directas. Manifestaron, también, su intención de potenciar la presencia del vehículo eléctrico.

La estrategia llega en una nueva etapa para la compañía. El pasado 18 de mayo se anunció de manera oficial el fin de una era: cerró la venta de un 20% que mantenía en Gas Natural a Rioja Bidco Shareholdings, la sociedad controlada por fondos asesorados por CVC y participada por Corporación Financiera Alba, por el importe total de 3.816,31 millones de euros. Este ejercicio de venta se inició en febrero y pone fin a una relación entre la petrolera y la gasista que se remonta a los años noventa. 

El objetivo que Repsol se ha marcado con la compra de cinco centrales en España es alcanzar 2,5 millones de clientes minoristas de gas y electricidad en 2025 y “una capacidad de generación baja en emisiones” de alrededor de 4.500 MW. Para llegar a su objetivo, en seis años tendrá que hacerse con 1.150MW más.

En lo referente a las comercializadoras que también adquiere, confirma que le permiten aumentar significativamente su presencia en el sector minorista de gas y electricidad de España, con una cuota de mercado superior al 2% y cerca de 750.000 clientes.