El Ministerio de Fomento está trabajando en un importante abanico de medidas que permitan ampliar la oferta de pisos de alquiler, dejen de escalar los precios y facilite el acceso a los jóvenes y familias de rentas bajas. Esta propuesta incluye un plan para que se construyan 20.000 viviendas que se destinarán al alquiler a precios limitados en aquellas ciudades donde los precios se han disparado, según informa El País.

Además, pretende que la duración de los contratos de alquiler se amplíe de tres a cinco años, se limiten las fianzas y se estimule con incentivos fiscales la oferta de vivienda en alquiler y la moderación de las rentas. Más presupuesto, cambios regulatorios y una reforma fiscal serían las tres piezas clave del plan que el Ministerio de Fomento propone para dar este giro a las políticas de vivienda; de las que hablará hoy José Luis Ábalos en el Congreso. El fin último es evitar una nueva burbuja de precios de la vivienda que desestabilice otra vez la economía, trasladan fuentes gubernamentales y ayudar especialmente a familias con pocos recursos y a los jóvenes.

El proyecto recoge, también, medidas urgentes destinadas a paliar el incremento de los precios de alquiler, que durante los últimos cuatro años han aumentado un 50% en las grandes ciudades debido a la irrupción de los alquileres turísticos y la reactivación del mercado inmobiliario. El Gobierno pondrá en marcha un Grupo de trabajo interministerial dirigido a desarrollar el conjunto de políticas urgentes en materia de vivienda y alquiler.

La iniciativa de crear 20.000 viviendas de alquiler a precios asequibles se prevé en un plazo de cuatro a seis años.

El Estado promoverá la construcción de estas casas mayoritariamente (aunque esta condición aún no está asegurada y se estudiará cualquier fórmula posible porque el objetivo es que se construyan en el menor tiempo posible) destinadas de forma indefinida al alquiler o la cesión en uso, con una renta o precio limitado, en aquellas ciudades de demanda acreditada y donde los precios del alquiler sean más altos.

Según datos de Idealista, las ciudades que han incrementado su precio del alquiler en los últimos cuatro años son Palma de Mallorca, Las Palmas, Barcelona, Valencia, Madrid, Málaga, San Sebastián y Sevilla.

En el año 2017 se terminaron de construir en España 48.853 viviendas libres y 4.938 de protección oficial, según datos de Fomento. En 2007, el momento álgido de la burbuja inmobiliaria se llegaron a construir 650.000 viviendas en un año.

El plan se llevará a cabo con la colaboración de las comunidades autónomas y los ayuntamientos, que identificaran y facilitaran los suelos más adecuados sobre los que levantar esas promociones de viviendas. El Estado involucrará también al SEPES, la entidad pública empresarial del suelo, en este programa, y contribuirá con su impulso y apoyo financiero. El ICO también jugará un papel en el diseño de estas políticas.

El objetivo a corto plazo es que el Ejecutivo promueva un cambio del régimen jurídico del alquiler, con el fin de revertir las consecuencias de la reforma “liberalizadora” que hizo el Partido Popular en el año 2013 de la Ley de Arrendamientos urbanos. Probablemente, recuperando los de la Ley de 1994, se ampliarán los plazos de prórroga obligatoria y tácita de los contratos de arrendamiento. Es decir, se vuelve a la prórroga forzosa hasta cinco años. El Partido Popular en el año 2013 lo rebajó a tres años, lo que hizo que el propietario se enfrentara a una notable subida de la renta o al propietario dar por concluido el contrato.

La reforma legal establecerá, además, límites razonables a las fianzas que se exigen al arrendatario. Lo que se pretende es evitar que haya que aportar 2.000, 3.000 o hasta 4.000 euros para poder alquilar una vivienda. Del mismo modo, se protegerá a los inquilinos en el caso de que se venda su casa, porque el nuevo propietario deberá respetar el contrato de arrendamiento.